La multinacional sueca Ikea ha anunciado la retirada del mercado estadounidense de 29 millones de cómodas después de que la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de los Estados Unidos (CPSC por sus suglas en inglés) haya establecido su relación con la muerte de seis menores en los últimos 14 años.
La Comisión destaca que los muebles retirados de la venta pueden derrumbarse con facilidad si no están anclados convenientemente a las paredes y afecta a seis modelos de cómodas Malm, que actualmente pueden encontrarse de oferta en distintos centros de España para socios de Ikea Family, así como otros cien de otros tipos de cómodas. La institución justifica su decisión argumentando que "las cómodas y tocadores retirados son inestables si no se fijan a la pared adecuadamente, presentando un gran riesgo de volcarse y de que alguien quede atrapado, lo cual puede causar muerte o lesiones a niños". [Consulte la relación completa de muebles retirados aquí]
El último accidente tuvo lugar en marzo de este año, pero entre 2002 y 2016 se han producido otros cinco que han provocado la muerte de otros tantos pequeños que quedaron atrapados bajo estas cómodas. Además de estas seis muertes, Ikea ha recibido reclamaciones por 41 accidentes en los que resultaron heridos 17 niños entre los 19 meses y 10 años.
Por ello, la empresa lanzó el pasado verano una campaña en Estados Unidos y Canada con el fin de incitar a los propietarios de las cómodas de la gama Malm a fijarlas a la pared para los que entregó los kits de fijación de manera gratuita y les recomendó que no la colocaran a una altura superior a un metro, ni en dormitorios de niños ni en los de adultos, ya que podrían suponer un gran peligro si no estuvieran colocados de manera adecuada.
Ahora, quienes compraron estos muebles entre enero de 2002 y junio de 2016 podrán pedir un reembolso por el coste total y quienes los adquirieron antes de enero de 2002 podrán solicitar un crédito parcial en una tienda, según ha explicado la compañía.
Desde Ikea Iberia señalan que la medida de IKEA Estados Unidos y Canadá es una campaña en colaboración con la CPSC "para concienciar sobre el riesgo de vuelco de mobiliario en el hogar y respeto de las medidas de seguridad en el montaje y anclaje que incluyen nuestros productos". «las cómodas de Ikea satisfacen las obligaciones de estabilidad en todos los mercados donde se venden».
Los consumidores que lo deseen podrán devolver el producto en cualquier tienda de España
En España, la compañía no ha tenido conocimiento de ningún accidente ni requerimientos o comunicaciones de las autoridades españolas por lo que los muebles no van a ser retirados del mercado, pero sí han decidido lanzar una campaña de comunicación "replicando el protocolo de concienciación con mensajes en las tiendas, en nuestra página web y ofreciendo kits de seguridad adicionales a los que ya vienen en nuestros productos". La filial española de la compañía también ha destacado que se pondrá en contacto con sus proveedores de servicios "para concienciarles sobre el problema de seguridad, con el objetivo de que hagan hincapié a los clientes en la necesidad de asegurar el producto a la pared".
Sin embargo, los consumidores que lo deseen podrán devolver el producto en cualquiera de sus tiendas, ya que "para nosotros, los niños y las niñas son las personas más importantes del mundo y la seguridad de nuestros productos es nuestra máxima prioridad".
La compañía insiste en que "este tipo de accidentes surgen por no anclar los muebles a la pared, independientemente de que sean Malms de IKEA o de cualquier otra empresa"
