Inditex ha presentado, un año más, los mejores resultados de su historia. Pese al tropezón bursátil de este miércoles, propiciado por la ralentización de las ventas del grupo en el último trimestre del ejercicio fiscal 2012 (concluido en febrero), los datos ratifican a la empresa fundada por Amancio Ortega, el millonario que más aumentó su fortuna el año pasado, como una de las grandes vencedoras de la actual crisis, la mayor desde la Segunda Guerra Mundial. Entre 2007, fecha que marca el inicio del reventón económico, y 2012, la compañía prácticamente ha duplicado su tamaño en muchas de sus variables clave.
En concreto, desde el ejercicio fiscal 2007, concluido en febrero del año siguiente, cuando ya era evidente que esto iba mucho más allá de una “desaceleración”, el beneficio del grupo ha crecido un 88,8%, hasta 2.360 millones de euros, y sus ventas, un 69%, hasta casi 16.000 millones.
Su valor bursátil se ha multiplicado 3,1 veces, hasta 65.800 millones, y su plantilla ha crecido algo menos, un 51,3%, hasta los 120.314 empleados. Por su parte, la remuneración del consejo de administración de Inditex ha pasado de 4,5 millones anuales a los más de 8 millones de 2012, y la retribución media de los altos directivos ha pasado de unos 484.000 euros a 671.000 euros anuales.
Desde que comenzó la crisis, Inditex, que se ha encaramado al liderazgo mundial del sector textil, ha entrado en 18 nuevos mercados, hasta los 86 actuales, cifra que no prevé incrementar este año, según dijo este miércoles el presidente y consejero delegado de la compañía, Pablo Isla, en su tradicional encuentro anual con los medios de comunicación.
En este periodo de turbulencias, la red de tiendas del grupo, que ha dado por concluida su expansión en España, ha crecido un 62,8%, hasta 6.009 establecimientos, 2.318 más. Esa cifra implica que Inditex ha abierto, de media, más de seis tiendas cada semana en plena debacle económica.
Si se echa la vista más atrás, por ejemplo, a la evolución en la última década, las cifras también son espectaculares. El grupo textil vale casi cinco veces más en Bolsa que cuando finalizó el ejercicio 2002; su beneficio es 5,3 veces mayor; las ventas se han cuadruplicado, y la plantilla es 3,7 veces mayor. El número de países en los que está presente se ha duplicado y la red de tiendas es 3,8 veces más extensa.
