Liberbank cumple por adelantado los compromisos que adquirió al anunciar la ampliación de capital de 500 millones, todavía pendiente de ejecutarse. La entidad liderada por Manuel Menéndez ha cerrado la venta de una cartera de 600 millones en deuda inmobiliaria al fondo norteamericano Bain Capital, tal y como publicó este medio, y a Oceanwood, uno de los principales accionistas del banco.
La entidad asturiana mantendrá una participación del 9,99% en la sociedad, de la que traspasa un 80% a Bain Capital y un 10,01% a Oceanwood. Vender el 100% podría haber supuesto unas minusvalías de unos 150 millones, teniendo en cuenta que la cartera inmobiliaria banco estaba cubierta al 40% en junio y que los fondos oportunistas exigen descuentos del 60-65% para estas operaciones.
De los 602 millones que traspasa Liberbank, 180 millones son suelos y obras en curso, 80 son millones activos terciarios (logística, centros comerciales y oficinas) y 342 millones son producto residencial.
La venta de estos inmuebles suponen un acelerón en la estrategia de desagüe del ladrillo de Liberbank. Al anunciar su ampliación, la entidad se comprometió con los inversores de su a sacar de su balance 800 millones antes de final de año (en junio tenía en torno a 6.000 millones). Durante la primera mitad del año vendió a través de su red 260 millones. Sólo en el tercer trimestre (verano incluido), colocó pisos y suelos por 210 millones, según explicó Menéndez en la junta extraordinaria. Y ahora traspasa unos 600 millones. En total, 1.045 millones.
Con ello, el objetivo es que la morosidad baje hasta el 9% a final de año, frente al 14% con el que empezó 2017; y que los activos problemáticos pesen un 18%, frente al 24% del pasado 1 de enero, tras vencer el esquema de protección de activos (EPA) de CCM. La cobertura de los problemáticos debería situarse en el 49%, frente al 40% de junio.
Sintonizar con el mercado
Esta estrategia persigue recuperar la sintonía con el mercado cuanto antes, de cara a la ampliación de capital de noviembre y del fin del veto de las posiciones cortas, con el que la CNMV ha protegido a Liberbank en los últimos cuatro meses y medio.
La ampliación cuenta ya con el compromiso de parte de su núcleo duro de accionistas, como el fondo Oceanwood, el mexicano Tinajero y los Masaveu. Las fundaciones de las cajas también suscribirán acciones, por el importe que obtengan de vender parte de los derechos (operación blanca). Hay varios fondos interesándose por este paquete de acciones, que puede ascender a un 15-20% del nuevo capital.