A muy poca gente en España le dicen algo los nombres de Juan Carlos Escotet o Lorenzo Mendoza, pero no estará de más que los vayan memorizando, porque van a estrechar lazos por estos lares mucho más de lo que ya lo están haciendo. Se trata de las principales fortunas venezolanas, junto al muy conocido Gustavo Cisneros. Aunque las amenazas de Nicolás Maduro a España no parecen augurar precisamente buenas relaciones comerciales, los empresarios locales hace tiempo que están analizando la crisis española. En general, tienen su capital repartido entre el país y territorios off shore, pero cuando desaparezca el régimen y por tanto, determinados riesgos, tienen intención de moverlo mucho más.
El primero es presidente y fundador del mayor banco del país, Banesco y acaba de tomar posiciones en Galicia. El segundo es la mayor fortuna venezolana según fuentes locales (Forbes lo ‘empata’ prácticamente con Cisneros) y controla la todopoderosa empresa alimentaria Polar. Nicolás Maduro se ha echado en sus brazos en los recientes episodios de desabastecimiento en Venezuela.
El presidente de Empresas Polar se ha puesto a plena producción, pero lo que están fallando son las plantas manufactureras de materias primas, en poder del estado. Después de una reunión entre Maduro y Mendoza, el mensaje fue claro: las plantas de maíz, leche, harina, atún... están todas con muy baja producción. Polar puede mejorar la productividad, pero eso supone que el estado ceda poder.
Mendoza es, probablemente, la persona más importante del país ahora mismo; "mucho más ya que Cisneros", dicen fuentes locales. Entre otras cosas, porque es el gran apoyo que tiene detrás el opositor Henrique Capriles. En su momento, incluso se planteó la posibilidad de que el propio Mendoza fuera el líder opositor. Ahora, con el convencimiento de que han ganado las elecciones y los resultados han sido falseados, en las élites políticas existe el convencimiento de que el chavismo tiene las horas contadas. No harán mucha presión porque contemplan que es una fruta madura que caerá por su propio peso. Maduro no logra controlar el aparato; sufre una tremenda crisis interna y ahí están los casos de desabastecimiento para provocar un cambio que se otea en el horizonte.
El grupo Empresas Polar opera en segmentos como la cerveza, los refrescos, los helados, productos lácteos y alimentación en general. Ha sido continuo objeto de deseo por parte del chavismo, pero no ha podido ser incautada, entre otras cosas por el apoyo de los trabajadores a la compañía. Ahora, el Gobierno tiene que pedirle ayuda.
Infranqueable
Pese a muchos intentos, no ha habido posibilidad de infiltrados ni piquetes que llevaran a la compañía a una situación que justificara la nacionalización. Al contrario, Polar ha conseguido expandirse y tiene cifras de facturación más importantes en Colombia.
Con España, ha firmado una alianza con Pascual, a través de la compañía Pascual Andina, en cuyos consejos de administración están, entre otros, Tomás Pascual, hijo del fundador del grupo español que lleva su nombre y el propio Mendoza. Esto se ha traducido en la creación de la marca de yogures de bajo coste Mi Gurt. Polar aporta el capital, Pascual la tecnología y el know how y hay planes para extender esta experiencia a otro mercad más que interesante: Colombia.
La inauguración de la planta tuvo lugar a finales del pasado año y apenas tuvo eco en la prensa española. Pero en el evento estuvieron tanto Mendoza como Pascual; todo un duelo de millonarios, ya que los españoles tampoco son mancos: además de su grupo, tienen otros 234 millones de euros en una sicav en la selecta gestora de fondos Bestinver.
Feijóo le adora
Por su lado, Juan Carlos Escotet es una de las personas sin duda más tiempo ocupa en las oraciones de Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta de Galicia. El pasado mes, el venezolano anunció, después de la adquisición del Banco Etchevarría, su intención de abrir unas 70 sucursales bancarias en Galicia, generando 200 empleos. Todo ello, con cumplida información al presidente de la Xunta, que suspira por que irrumpan más casos como estos que le mitiguen los temores crecientes que laten sobre la crisis de Pescanova.
Banesco ha mostrado su interés por la red de NovaGalicia y el propio Escotet ha reconocido que quiere crear una puerta de entrada de capitales venezolanos a España, a través de Galicia. Pero la cosa no queda ahí: Banesco Holding ya está operativo desde hace meses y su nombre suena continuamente cada vez que hay algún activo a la venta.
Esta entidad financiera es la mayor de Venezuela. Fundada por el propio Escotet a principios de los 90, cuando era un simple bróker, tiene claro que hay mucho dinero en el país, generado en estos 14 años de chavismo. Si antes, apenas era conocido Cisneros, ahora es incontable el número de billonarios en dólares, surgido al calor del chavismo y el petróleo.
Se trata de grupos empresariales que han sabido llevarse bien con el controvertido mandatario. Grupos que ya en noviembre o incluso antes se arrimaban a Maduro, porque sabían que Chávez no volvería de Cuba, pese a la propaganda oficial que se esforzaba en difundir fotos con sus hijas e insistir en que apretaba la mano con más fuerza que nunca. La presencia de Banesco en otras plazas como Colombia, EE UU (Miami), Panamá o República Dominicana deja claro que se trata de un banco con mucha capacidad de recolocar dinero off shore en posición on.
La M-40
Podría hablarse también de la reciente compra del centro comercial Avenida M-40 en Leganés, para reconvertirlo en un outlet (un modelo que se está demostrando imparable en los actuales tiempos de crisis) por parte del venezolano Grupo Sambil de la familia Cohen, que con esta, realiza su primera inversión en Europa. Pagaron 17 millones de euros, cerrando la operación con toda celeridad.
Los millonarios de Venezuela han aterrizado poco a poco y esperan sin prisa pero sin pausa a que finalice el chavismo para mover sus capitales con mayor comodidad. Mientras tanto, han señalado a España como país de oportunidades, como antaño se hacía desde Europa con Latinoamérica.