A través de estas sociedades, los empresarios controlan algo más del 31% del capital de Gecina, una de las mayores inmobiliarias de Francia. Joaquín Rivero, ex presidente de Metrovacesa y también de la propia Gecina; y su socio Bautista Soler habían iniciado las negociaciones con el sindicato bancario para refinanciar el préstamo concedido en 2006 para lanzar una OPA sobre Metrovacesa, en plena guerra por el control de la inmobiliaria con la familia Sanahuja.
En abril, Rivero y Soler habían llegado a un acuerdo con la banca acreedora, que puso tres condiciones: la elaboración de un plan de viabilidad, el informe de un experto independiente y el levantamiento de un embargo que pesa sobre los dividendos de Gecina que corresponden a Alteco, según informaba esta mañana El País.
Mientras que las dos primeras se cumplieron, la tercera se ha retrasado al depender de un recurso interpuesto por el propio Rivero en los tribunales franceses, cuya resolución no ha llegado a tiempo.
Al corriente de pagos
Ante esta situación, mientras el resto de los bancos acreedores (un total de 12) aceptó conceder una prórroga toda vez que el préstamo estaba al corriente de pago, Natixis se negó, con lo que el préstamo se dio por vencido y Rivero y Soler no han tenido más remedio que solicitar el concurso.
De acuerdo con una nota emitida por Alteco y Mag Import, ambas compañías han cumplido sus pagos de intereses por un importe aproximado de 446 millones de euros, y redujeron el importe inicial del préstamo en 533 millones de euros, que representa un 25% de reducción total.
Como garantía de los préstamos actúan las acciones de Gecina en poder de Alteco y Mag Import que, a precio actual de mercado, cubren el importe del préstamo.