El juzgado de instrucción número 5 cuyo titular es el juez Pablo Ruz, ha admitido a trámite las querellas puestas por tres grupos de accionistas minoritarios particulares de Pescanova, así como por Gesrenta BCN.
Las querellas iban contra dirigentes y consejeros de la entidad que vendieron acciones antes de la presentación del preconcurso de acreedores, así como contra el auditor BDO, el principal bróker vendedor de títulos, Sabadell Bolsa, por uso de información relevante y falseamiento de información en lo relativo a la ampliación de capital del pasado año.
Vozpópuli ya informó en su momento de que Sousa y su entorno (tanto familiares como consejeros históricos) habían vendido acciones de Pescanova antes de que estallara una enorme crisis que ha dejado atrapados a muchos accionistas o han causado enormes pérdidas a los que pudieron vender en el interín comprendido entre la no presentación de cuentas y la solicitud de concurso.
El juzgado ha admitido parcialmente las querellas, dejando fuera a BDO y Sabadell Bolsa. Por el contrario, ha imputado al ex presidente de Pescanova, Manuel Fernández Sousa, al consejero y antiguo consejero delegado Alfonso Paz Andrade y a los accionistas José Alberto Barreras Barreras y José Antonio Pérez Nievas.
Se ahorró 15,6 millones
En el caso del primero, porque “entre el 7 de enero y el 27 de febrero de2013 através SOCIEDAD ANÓNIMA DE DESARROLLO Y CONTROL (SODESCO) vendió 1.688.518 acciones a un precio medio de 16,26 €, lo que supuso un ingreso de 27.459.442 € y la evitación de una pérdida de 15,6 millones de euros, según estimaciones de la CNMV”.
Asimismo, Fernández Sousa “vendió en septiembre y diciembre de 2012 y enero de2013 através de INVERPESCA SA y SOCIEDAD GALLEGA DE IMPORTACIÓN DE CARBONES SA un total de 560.678 y 24.400 acciones respectivamente, evitando otras pérdidas patrimoniales cuyo importe no ha sido estimado por la CNMV”.
Por su lado, su antiguo camarada Paz Andrade, consejero y antiguo alto ejecutivo, “entre el 29 de enero y el 27 de febrero de2013 através NOVA ARDARA EQUITIES SA vendió 344.972 acciones a un precio medio de 16,86 €, lo que supuso un ingreso de 5.815.674 € y la evitación de una pérdida de 3,4 millones de euros, según estimaciones dela CNMV. Igualmenteel 27 de febrero de2013 através de IBER-COMERCIO E INDUSTRIA SA vendió otras 420 acciones a un precio medio de 16,53 € por acción, evitando una pérdida de 3.991 €”.
En la querella, ambos serán investigados por presunto delito de “falseamiento de información económico-financiera, falseamiento de cuentas anuales y uso de información relevante”.
A su vez, Barreras, a su vez “vendió 700.000 acciones a un precio medio de 16,02 €, lo que supuso un ingreso de 11.215.175 € y la evitación de una pérdida de “, según estimaciones de la CNMV”, a través de su sociedad TRANSPESCA SA, entre los días 11 de enero y 6 de febrero. Por último, Pérez-Nievas “vendió 110.000 acciones a un precio medio de 17,02 €, lo que supuso un ingreso de 1.872.113 € y la evitación de una pérdida de 1.390.057 €, según estimaciones de la CNMV”, entre los días 25 y 26 de febrero.
Estos dos son imputados por uso de información privilegiada. Asimismo, la sociedad Pescanova es imputada de falseamiento de información y las mercantiles Inverpesca, Sociedad Gallega de importación de carbones, Sociedad anónima de desarrollo y control, Transpesca, Nova Ardara Equities, Golden Limit e Ibercomercio e industria, por uso de información privilegiada.
De momento, quedan fuera de la querella la auditora BDO y el bróker del Sabadell, “sin perjuicio de nuevas imputaciones que puedan resultar de la instrucción”.