El tiempo apremia y quedan sólo seis días para alcanzar un acuerdo que ponga fin al conflicto de Sacyr con Panamá. De ahí que el Gobierno español se haya implicado al más alto nivel para dar el último impulso al acuerdo. Jorge Moragas, Jefe de Gabinete del presidente Rajoy, ha tomado las riendas de las negociaciones con la Autoridad del Canal (ACP) y con el Ejecutivo que preside Ricardo Martinelli y se está encargando de coordinar a los Ministerios de Fomento y Exteriores en la búsqueda de una solución.
Según confirman fuentes conocedoras del proceso, Moragas ha asumido el liderazgo ante la inminencia del plazo fijado en el preaviso remitido por Sacyr y su consorcio a las autoridades panameñas que fijaba el 20 de enero como el día de paralización de las obras de ampliación del Canal en caso de que no se resolvieran los problemas económicos por los sobrecostes del proyecto.
Hasta ahora, había sido la ministra de Fomento, Ana Pastor, la que había representado al Gobierno español en el tira y afloja con Panamá, a donde se desplazó en viaje oficial por tres días. Desde Exteriores ha sido la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales, encabezada por Fernando Eguidazu, la que ha hecho un seguimiento del asunto.
La visita de la ministra Pastor no resolvió los principales escollos y Moncloa ha decidido liderar las negociaciones ante la inminencia de la fecha límite del 20 de enero
Pero los avances han sido mínimos, hasta el punto de que Pastor volvió de Panamá sin resolver los principales escollos. Así que Moncloa se ha puesto manos a la obra y ha tomado las riendas. Lo primero que ha hecho es posicionar a Sacyr en la línea correcta de cara a las negociaciones con Panamá, señalan fuentes políticas.
Por indicación de Moncloa, el presidente de la compañía española que lidera el consorcio que desarrolla las obras, Manuel Manrique, vino en viaje exprés a Madrid este lunes para dar a cara públicamente y confirmar que Sacyr "no va a abandonar" el proyecto de ampliación, pese al ultimátum lanzado el 30 de diciembre.
"España no puede permitirse dañar su imagen a nivel internacional abandonando un proyecto tan señero como éste y de tanta repercusión para las relaciones comerciales mundiales, en el que países como EEUU han puesto sus ojos muy de cerca y confían en que se culmine con éxito su ampliación", señalan fuentes políticas.
Un fracaso de Sacyr en un proyecto tan emblemático como éste dañaría la Marca España a nivel internacional, temen en el Gobierno
Manrique insistió en que Sacyr "no contempla otro escenario" que no sea el de llegar a un acuerdo con la Autoridad del Canal y "solventar" los problemas "puntuales" de financiación del proyecto para que las obras finalicen "en 2015", en línea con lo previsto.
El directivo jienense mantuvo el preaviso para el próximo lunes, pero de su intervención se dedujo que habrá acuerdo antes de ese día, porque "Sacyr no va a abandonar el proyecto, las obras van a continuar y se van a acabar porque no contemplamos otro escenario que el del acuerdo".
Al igual que ocurrió con Repsol en Argentina, el acuerdo con Panamá será entre Estados, entre Gobiernos, y no entre empresas, dada la trascendencia política del conflicto
"Al igual que ocurrió con Repsol en su conflicto con Argentina, el acuerdo que habrá en Panamá será entre Estados, entre Gobiernos, no entre empresas", sentencia un experto internacional.
En el caso del conflicto de la petrolera, mucho más grave y enconado, desde Moncloa se creó un grupo de trabajo en el que estaban presentes Exteriores e Industria. Ahora no ha sido necesaria la creación de este grupo o comisión, pero hay plena coordinación entre Exteriores y Fomento con el equipo de Moragas, añaden fuentes políticas.
"Antes de que finalice la semana se anunciará un acuerdo con el Gobierno de Martinelli y la Autoridad del Canal", concluyen estas fuentes.
