Sareb ya trabaja en un nuevo concurso de su mayor contrato de gestión. Se trata de los 24.000 millones en antiguos créditos inmobiliarios de Bankia que administra Haya Real Estate, la inmobiliaria de Cerberus. El contrato vence a finales de 2019, pero Sareb ya está trabajando en distintas opciones para poner en marcha el concurso a corto plazo y que éste esté adjudicado en algo más de un año.
Entre las distintas opciones sobre la mesa está trocear el contrato en dos o varios mandatos, según confirmó a este medio Sareb.
Hay varias opciones a día de hoy bajo estudio. La primera, sacar el contrato de 'servicing' de 24.000 millones (en términos brutos, en neto está en torno a 13.000 millones) tal y como está hoy, con un sólo gestor que podría ser Haya Real Estate o alguno de sus grandes competidores, como Altamira, Aktua, Servihabitat, Solvia o Aliseda-Anticipa (Blackstone).
Este escenario es el que más interesa a Haya Real Estate, que se juega mucho con este contrato que supone un 60% de sus activos, en plena salida a bolsa. Le interesa porque la plataforma de Cerberus es la que mejor conoce los activos y cuenta con la ventaja de no tener que migrarlos, lo que ralentizaría el ritmo de ventas de Sareb.
Otras opciones
Lejos de esta alternativa, el resto supondrían repartir el megacontrato entre varias plataformas. Una de las opciones que se está barajando es sacar a contrato ligado a la propiedad de activos. Es decir, una gran operación como las que han protagonizado Santander con Blackstone -Proyecto Quasar- o BBVA con Cerberus -Proyecto Marina-.
Sería también mediante la creación de una sociedad participada de forma conjunta, como los FAB. De esta forma, Sareb mataría dos pájaros de un tiro: desconsolidar activos sin perder potenciales plusvalías; y como gancho adjudicar al fondo-plataforma la gestión.
Otra opción sobre la mesa es dividir la cartera de Haya en dos o varios bloques. Podría ser por tipo de activo al que está ligado la deuda (terciario, residencial, suelo...) o por zona geográfica, aprovechando así la especialización de las plataformas.
El primer contrato que se renueva es de Haya Real Estate. Los otros tres no vencen hasta 2021: el de Altamira, con 28.000 inmuebles de las carteras de Catalunya Banc, Caja 3 y BMN; el de Solvia, con 34.000 inmuebles procedentes de Bankia; y de Servihabitat, con inmuebles y créditos de NCG, Liberbank y Banco de Valencia.