Los datos que las compañías de telecomunicaciones han publicado sobre sus plataformas de televisión de pago dejan claro que la televisión de Vodafone crece a un ritmo mucho menor que sus competidores. Entre enero y junio, su número de abonados creció en 43.000 personas, frente a las 98.000 que reclutó Vodafone y las 268.000 de Movistar.
La empresa capitaneada por Antonio Coimbra cuenta con la segunda televisión de pago con más abonados, con 1.328.000, frente a los 639.000 de Orange y los 3.934.000 de Telefónica. Ahora bien, su evolución en los últimos 12 meses ha sido peor que la de sus rivales y no se espera que la tendencia se revierta próximamente, si se tiene en cuenta su renuncia a comprar los derechos audiovisuales de la Liga de Campeones y de El Partidazo.
La compañía reconoce que aproximadamente 400.000 de sus clientes de la televisión de pago tienen contratado el fútbol y anticipa que tratará de retenerlos ofreciendo gratis los partidos que podrá emitir durante la próxima temporada -ocho de Primera División, los de Segunda y la Copa del Rey- y apostando por el cine y las series. Ahora bien, en el sector de las telecomunicaciones existe el convencimiento de que la ausencia en sus canales de muchos de los grandes partidos afectará a su número de abonados, de ahí que sus competidores preparen planes para tratar de atraerlos.
En este sentido, cabe recordar el daño que sufrió Movistar en la última parte de 2015, cuando no emitió la Liga de Campeones ante su negativa a pagar a Jaume Roures –propietario entonces de sus derechos audiovisuales- la cantidad que le reclamaba. Entonces, perdió 70.000 clientes, mientras que Vodafone ganó 87.000 y Orange, 62.000.
Mala evolución
Más allá de todo esto, lo cierto es que los últimos meses la evolución de la televisión de pago de Vodafone ha sido peor que la de sus competidores. Entre septiembre y junio, cuando se juegan las competiciones deportivas, perdió 4.000 socios, mientras que Movistar y Orange ganaron 168.000 y 46.000, respectivamente.
Si se toma como referencia el período diciembre-junio, se observa que su número de abonados se redujo en 42.000, mientras que la ‘telco’ radicada en Francia sumó 13.000 y la presidida por José María Álvarez-Pallete, 87.000, según los propios datos presentados por las operadoras en sus informes de resultados.
Los cálculos de Vodafone le llevan a concluir que comprar todo el fútbol sería menos rentable que prescindir de este producto.
Los cálculos de Vodafone le llevan a concluir que comprar todo el fútbol sería menos rentable que prescindir de este producto, pese a la pérdida de clientes que muy probablemente provocaría esta decisión. En cualquier caso, fuentes del grupo afirmaban hace una semana a este periódico que siempre hay tiempo para rectificar esta decisión; y recordaban que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) obliga a Movistar a compartir con el resto de los operadores una parte de sus contenidos premium, en la que se encuentran estos partidos.
La importancia de este deporte en la televisión de pago ha sido clave durante los últimos años. Sin ir más lejos, los pasados abril y mayo, cuando se resolvieron las principales competiciones nacionales y europeas, 48 de los 50 programas más vistos en estas plataformas estuvieron relacionados con este deporte. Los otros dos fueron contenidos de Fórmula 1, que tampoco emitió Vodafone.