"Todos los clubes españoles están preparados para salir a bolsa", afirmaba recientemente el director corporativo de LaLiga, Javier Gómez. Lo hacía a la vez que anunciaba que la patronal de los clubes de fútbol, trabaja ya con clubes y bancos para preparar salidas a bolsa en un fútbol que progresivamente va saneando sus cuentas. Según ha llegado a afirmar el propio presidente de LaLiga, Javier Tebas, seguramente "habrá algún equipo español en bolsa" ya en 2020.
Sin embargo, distintos expertos en finanzas deportivas consultados por Vozpópuli no ven tan clara la posibilidad de que un club español salga finalmente a bolsa. "He leído lo que dijo Tebas pero yo no lo veo", afirma el economista e inversor Josep María Gay de Liébana, quien esgrime además que "el hecho de cotizar en bolsa no ha acabado de cuajar en términos futbolísticos", recordando los casos de equipos como la Juventus, "que tiene a la familia Agnelli detrás", y la Roma en Italia.
Volatilidad
"Las acciones de un club de fútbol son un valor muy volátil, ha pasado con la Juve cuando perdió la final de la Champions contra el Real Madrid, los títulos cambian mucho según los resultados, si se pasa de una ronda de Champions o no", subraya Gay de Liébana, en la misma línea que el consultor y asesor internacional en gestión de clubes de fútbol, Pere Solanellas: "La volatización de las acciones de los equipos internacionales que ahora mismo cotizan supone una gran incógnita para el fútbol español. Sirva de ejemplo que la Roma (equipo cotizado en la bolsa de Milán) subió un 20% por la victoria sobre en Barcelona en la última Champions".
Gay de Liébana, en tanto, asegura que él como exinversor del Espanyol que ha sido, jamás invertiría en un club en bolsa. "La inversión en fútbol es más emocional que una inversión en términos económicos", asevera. En este sentido, reconoce además una diferencia cultural y estructural con el mundo anglosajón haciéndose eco de la 'historia de bolsa' del Manchester United. "Es un club con una estructura de holding financiero, propiedad de estadounidenses, que a su vez cuentan con una empresa que solo se dedica a captar capitales para el United y forma parte de una estructura de negocios de otro nivel como la de la Premier", apunta este economista, que recuerda que los Diablos Rojos han sido capaces de, aún habiendo quedado fuera de las competiciones europeas, haber firmado el mayor contrato de patrocinio televisivo de la historia, algo que el economista no ve muy al alcance siquiera del Real Madrid o el Barcelona.
"Solo ellos, el Real Madrid o el Barcelona (que juntos representan el 40% de los ingresos de LaLiga), ni siquiera el Atlético de Madrid - todavía con poco impacto más allá de Europa - o el Valencia, tienen la resonancia global y el potencial de negocio suficiente para captar un interés de los inversores que permita salidas a bolsa viables, y justamente ellos son los que no lo necesitan", apunta por su parte el experto en estrategia empresarial, Francesc Rufas. "Al fin y al cabo, el valor bursátil de una empresa depende de la expectativa de negocio, y en el caso de la primera división española, salvo con grandes inversiones, no hay una expectativa razonable de que algún club pueda llegar a competir realmente con el Real Madrid o el Barcelona".
Poca expectativa todavía de negocio en España
Este experto no descarta que la salida a bolsa pueda a llegar a ser viable para un club y para el inversor pero considera que, de momento, el precio no justifica la inversión, sobre todo en los clubes más pequeños que más precisan de capital. "Un club puede salir a bolsa por un valor de 100.000 euros pero lo que sucede en el fútbol español es que los clubes precisan más quizás lo que los capitales estén dispuestos a ofrecer".
Por otra parte, respecto a Real Madrid y Barça, Rufas es tajante. "Jamás los veremos en bolsa. Detrás de ellos hay un poder político que jamás querrá perder control. El Madrid es al final marca España, y el Barça, marca Cataluña. Hay mucho dinero detrás, empresas, grupos editoriales, grupos de empresas, intereses políticos...que no quieren un sistema que les haga perder control".
"Los equipos que podrían a priori tener cierto éxito en las OPV como son Barcelona y Real Madrid, son actualmente clubes de socios con una gran proyección internacional, con muchos fans y con grandes figuras internacionales en todo el mundo conocidas. Pero previo paso a una OPV tendrían que convertirse en SAD, con la repercusión traumática que pudiera ocasionar a nivel social donde como se ha visto siempre hay muchos intereses creados", explica por su parte Solanellas.
"Los otros equipos españoles, mayoritariamente SADs no tienen el volumen suficiente ni la proyección internacional y suelen ser muy volátiles sus resultados y sus clasificaciones", añade este experto. Sevilla, Atletico de Madrid y Valencia serían en todo caso los principales candidatos a ser los primeros en salir a bolsa para Solanellas aunque "con muchas incógnitas con los actuales equipos de gestión".
"A pesar de todas las incógnitas, creo que la salidas a bolsa serán inevitables y veremos equipos españoles saliendo a bolsa de aquí a tres-cinco años"
"La gestión profesional de los clubes de futbol y su 'governance' aún la podemos juzgar de incipiente y poco profesionalizada. Sería lógico pensar en estabilizar y profesionalizar mucho más las estructuras de los clubes a través del control por parte de LaLiga de unos estándares de gestión o libro blanco que permitiera un paso previo a las OPV que lo que pueden hacer si no se miden bien es agudizar el descalabro y el desgobierno, a pesar que las reglas de las empresas cotizadas obliguen a ser a uno más transparente a clubes que hoy por hoy toman decisiones obligadas por la presión de los resultados, realizando compras caras, vendiendo jugadores a precios de derribo y sobre todo sin planes estratégicos implantados", advierte Solanellas.
El progresivo saneamiento de las cuentas de los clubes anunciado por LaLiga permite aventurar que ese "paso previo" que cita Solanellas esté ya teniendo lugar: el último curso, LaLiga ingresó un 15% más, hasta los 3.662 millones de euros, y la deuda con Hacienda es de 96 millones y se estima que caiga a los 54 millones en 2020, correspondientes a los doce clubes que mantienen convenio de pago a sus acreedores tras haber salido de concurso: Betis, Celta, Deportivo de La Coruña, Girona, Levante, Albacete, Cádiz, Córdoba, Valladolid, Real Oviedo y Rayo Vallecano. Esta cifra de clubes contrasta con la situación en 2012 previa al 'control económico' fijado por LaLiga, cuando la cantidad de equipos que estaban o habían estado en concurso ascendía a 23.
Solanellas, en cualquier caso, cree que queda camino por recorrer aunque asegura que "a pesar de todas las incógnitas, creo que la salidas a bolsa serán inevitables: la aparición de grupos inversores y empresas que han entrado en el accionariado de los equipos españoles pueden recuperar y rentabilizar su inversión en una hipotética salida a bolsa. La presión está ahí. No creo que ahora los equipos estén preparados para hacerlo, les queda un buen recorrido en gestión, pero es probable que veamos salidas a bolsa en el fútbol español de aquí a tres o cinco años".