Ni Banco Popular, ni Catalunya Banc, ni NCG Banco, ni Banca Cívica, ni Banco Pastor... la mayor compra en la banca española de la última década es la de Barclaycard por parte de Wizink. La filial de Värde Partners (51%) y Santander (49%, heredado de Popular) pagó 1.426 millones por el negocio de tarjetas de Barclays, según figura en sus últimas cuentas.
El precio era un secreto hasta ahora en esta operación. No se supo ni durante las negociaciones ni al cerrarse la venta de Barclaycard a WiZink. Lo único que circuló en el mercado son distintas horquillas no oficiales que barajaban un precio de entre 300 y 500 millones.
Según explica WiZink en sus cuentas, los 1.426 millones fueron pagados principalmente por el negocio en Portugal, en el que Barclaycard era uno de los líderes del mercado. El desembolso por el negocio luso ascendió a 908 millones. Los otros 518 millones se corresponden con el precio de la filial en España.
Con la adquisición, cerrada en abril del año pasado, WiZink reforzó su cuota de mercado tanto en España y Portugal, con 900.000 clientes de Barclays y 500 empleados. Esta filial de Värde y Santander nació en 2014 bajo la marca Bancopopular-e, con el negocio de tarjetas de Popular y el de Citi.
Pieza codiciada
Junto a Barclaycard, esta financiera compró también el año pasado el negocio de tarjetas de Popular en Portugal, por el que pagó 37 millones de euros.
WiZink se ha convertido en los últimos meses en uno de los activos más codiciados de la antigua Popular, por sus elevados márgenes. Ganó 97 millones de euros en 2016 y ha anunciado dividendos por valor de 120 millones en los últimos dos años.
Barclays consiguió 2.300 millones por la venta de su negocio bancario en la Península a WiZink, CaixaBank y Bankinter
Por ello, su posible venta, que activó Popular antes de su rescate, generó mucho interés en el mercado. Su futuro pasa por lo que decida su principal accionista, el fondo norteamericano Värde Partners. Tras la toma de control por parte de Santander, el banco y el fondo tienen que decidir el futuro de WiZink: si lo recompra la entidad española, opción que no ve con malos ojos como reconoció el consejero delegado, José Antonio Álvarez; o si Värde apuesta por quedarse con el 100% para venderlo en unos años o incluso para sacarlo a bolsa.
La venta de Barclaycard a WiZink fue una de las tres operaciones con las que Barclays abandonó el negocio minorista en la Península Ibérica. Además vendió su banco tradicional en España a CaixaBank, por 800 millones; y su entidad en Portugal a Bankinter, por 86 millones. En total, 2.300 millones por traspasar todas sus operaciones bancarias en la Península. Barclays mantiene en España algunos negocios de banca corporativa, privada y de inversión.