Iberdrola ha marcado en estos días un máximo histórico de cotización en Bolsa tras la adquisición de la británica ENW el pasado 2 de agosto. La eléctrica que preside Ignacio Galán se convierte así en la energética más valiosa de Europa y una de las tres mayores del mundo, con una capitalización que ronda los 80.000 millones de euros. El nuevo máximo histórico - 12,55 euros por título, tras subir en la sesión del lunes un 1,62%- sitúa así a la compañía por encima de los 12,505 euros por título a los que cerró el 8 de enero de 2021.
Con este precio récord, la capitalización de Iberdrola se sitúa en 79.871 millones y supera a la suma de las valoraciones de todas las compañías relacionadas con el sector energético del Ibex: Naturgy, Endesa, Repsol, Redeia, Acciona Energía, Enagás y Solaria. La operación en Reino Unido, por un total de 5.000 millones -incluyendo la deuda de la empresa adquirida-, ha impulsado a Iberdrola más de un 3,2% en Bolsa desde los 12,155 euros por título a los que finalizó la sesión del pasado 1 de agosto, previa a conocerse la compra de ENW.
También han contribuido a este buen comportamiento los resultados presentados el pasado 24 de julio, cuando anunció un beneficio de 4.134 millones en el primer semestre, un 64% más, con un crecimiento del beneficio recurrente del 18% (sin incluir la venta en México), hasta los 2.969 millones. Iberdrola prevé que su beneficio neto recurrente crezca a un ritmo del doble dígito (un 10% o más) este ejercicio, frente al crecimiento del dígito alto augurado en el primer trimestre. Las inversiones en el primer semestre alcanzaron los 5.276 millones, un 16% más, camino del récord de 12.000 millones para el conjunto de 2024.
Los analistas señalan que estos resultados reiteran el ‘track record’ de Iberdrola en todos sus negocios, especialmente en redes. La compra de ENW contribuye a reforzar este sentimiento. Reino Unido se convierte en el primer país de la compañía por base de activos de redes con unos 14.000 millones, seguido de Estados Unidos con 13.300 millones.
“Como resultado de esta operación, nuestros activos regulados de redes en Reino Unido alcanzan los 14.000 millones, que, junto con una cantidad similar en Estados Unidos, representan dos tercios de todos los activos de redes del grupo”, señaló Ignacio Galán, presidente de Iberdrola el día del anuncio de la transacción.
Los analistas aplauden la operación
Goldman Sachs considera en un informe que “la transacción es positiva de la valoración del sector, dado el descuento de valoración que vemos en las redes reguladas del Reino Unido”. Mientras que Exane BNP Paribas destaca que “la operación se lleva a cabo a un precio razonable y, en nuestra opinión, existe un ajuste estratégico claro con posibles ventajas derivadas de las sinergias”. “Tras reforzar su plataforma de crecimiento en Reino Unido, Iberdrola continúa siendo una de nuestras opciones preferidas para afrontar la transición energética”, añade el departamento de análisis del banco francés.
JP Morgan señala que “la adquisición puede ser digerida por el balance actual de Iberdrola en un contexto de rotación de activos y alianzas de 12.000 millones de euros ya planificados entre 2024 y 2026”.
CaixaBank añade por su parte que “el mérito de la operación parece profundamente relacionado con el potencial de sinergias, que pueden ser significativas, pero que aún no han sido cuantificadas por Iberdrola”. Y Alantra argumenta que “la adquisición de ENW es una buena noticia para Iberdrola, ya que aumentará su exposición a redes en el Reino Unido, fundamental para el grupo”. Y agrega que “el aumento en el apalancamiento será pequeño, con una ratio de deuda respecto a ebitda, aumentando de 3,8 veces a 3,9 veces en 2025, sin afecta la calificación crediticia”.
Aval de las agencias de calificación
Las tres grandes agencias de rating –Standard & Poor’s (S&P), Moody’s y Fitch– prevén que la compra de Electricity North West (ENW) por Iberdrola mejore la calidad de los resultados de la mayor eléctrica de Europa por valor en Bolsa, gracias al incremento de la contribución de sus negocios regulados. Consideran además que goza de sobrada capacidad financiera para absorber la compañía británica.
S&P prevé que ENW contribuya con 500 millones anuales al EBITDA de Iberdrola, en el que las actividades reguladas supondrán alrededor del 50%, frente a los 47-48%, actuales. Moody’s afirma que la operación es positiva desde el punto de vista de la calificación crediticia de Iberdrola, que sitúa en Baa1: “La adquisición reforzará la predictibilidad de la generación de caja de Iberdrola, dado el régimen regulatorio bien establecido y transparente (en Reino Unido) y el sólido desempeño operativo de ENW”. Fitch también ve con buenos ojos la operación: “Iberdrola está bien posicionada para financiar la adquisición íntegramente en efectivo, sacando partido de sus amplias reservas de cash y de su margen de maniobra bajo su calificación de BBB+”.