Repsol cerró 2022 con sus mejores resultados en 12 años y arranca este año con un beneficio de 1.112 millones en los tres primeros meses. Una cifra que supone un 20% menos que los 1.392 millones de euros que ganó el año pasado en el mismo período.
Una moderación de los resultados, que son un 82% superiores a los que obtuvo Repsol en 2019, que viene marcados por la caída de los precios de los hidrocarburos. Estos disminuyeron de forma notable entre enero y marzo, lastrados por las perspectivas económicas inciertas de Estados Unidos y Europa ante las dificultades para frenar la inflación global.
El crudo Brent rebajó su cotización media hasta los 81 dólares por barril, un 21% menos que en el primer trimestre de 2022, con una caída notable en marzo, hasta los 72 dólares por barril, derivada de la crisis bancaria vivida a mediados de mes. Por su parte, el gas Henry Hub se pagó a una media de 3,4 dólares por MBtu, un 32% inferior a la de los mismos meses de 2022.
El resultado ajustado, que mide específicamente el funcionamiento de los negocios, alcanzó en el primer trimestre los 1.891 millones de euros. Durante el periodo, Repsol invirtió 1.726 millones de euros, destinados principalmente a España y Estados Unidos. La compañía prevé que un 35% de las inversiones de 2023 se destinen a proyectos bajos en carbono. Adicionalmente, la compañía redujo su deuda neta, hasta situarla en 880 millones de euros al final del periodo.
Todos los negocios en positivo
La división de Exploración y Producción obtuvo unas ganancias de 474 millones de euros, 257 millones menos que los que obtuvo en el primer trimestre de 2022. Una caída que se debe a unos menores precios de realización y una mayor amortización y costes de producción. Esto fue parcialmente compensado por mayores volúmenes, menores regalías, menores costes exploratorios, la apreciación del dólar frente al euro así como menores impuestos.
Su negocio Industrial registra un resultado de 1.279 millones de euros, 1.044 millones más que el mismo trimestre del 2022. La subida se debe a unos mayores resultados en los negocios de Refino, así como en Trading y Mayorista y Trading de Gas y a la apreciación del dólar frente al euro. Esto fue parcialmente compensado por menores resultados en Química, así como unos mayores impuestos derivados de un mayor resultado operativo.
El negocio de clientes generó los tres primeros meses del año un resultado ajustado de 174 millones de eur, 79 millones superior al del mismo trimestre del 2022, debido principalmente a unos mayores resultados en Movilidad, Comercialización de Electricidad y Gas, GLP y Lubricantes, Aviación, Asfaltos y Especialidades. Esto fue parcialmente compensado por mayores impuestos derivados de un mayor resultado operativo.
Por último, la generación de energía baja en carbono cierra el trimestre en 34 millones de euros, 6 millones de euros más, debido principalmente a unos mayores resultados en Renovables. Esto fue parcialmente compensado por mayores impuestos derivados de un mayor resultado operativo.
"Avanzamos en la descarbonización"
“Nuestro modelo de negocio integrado, así como el cumplimiento y la ambición de nuestro Plan Estratégico, están siendo fundamentales para obtener resultados sólidos”, apunta Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol.
“Al mismo tiempo, seguimos elevando nuestro perfil multienergético y avanzamos en la descarbonización. Hemos lanzado una oferta comercial pionera en España, que ayuda a nuestros clientes en su día a día al vincular todas las energías necesarias para la movilidad y el hogar, y afianza nuestra visión de compañía”, añade.
Repsol mantiene su ruta
"La compañía avanzó guiada por su Plan Estratégico 2021- 2025 y su modelo de negocio integrado, que fueron clave para obtener este resultado en un trimestre en el que los precios del crudo cayeron, de media, un 20% respecto al mismo periodo del año anterior", explica en su comunicado.
Repsol mantiene su política de descuentos en sus estaciones de servicio de España. Sumando el conjunto de 2022 y el primer trimestre de 2023, la petrolera apunta que ha generado ahorros adicionales para los clientes cercanos a 550 millones de euros.
También pone el foco en sus dueños. En lo que se refiere a la remuneración para los más de 520.000 accionistas de Repsol, la mayoría de ellos minoritarios y localizados en España, la compañía abonó el pasado enero un dividendo en efectivo de 0,35 euros brutos por acción.
Esta misma cantidad se distribuirá en julio tras su aprobación por parte de la Junta General, cuya celebración está prevista para el próximo 25 de mayo. Con estos pagos, en 2023 se incrementará un 11% la remuneración a los accionistas, hasta los 0,70 euros brutos por acción, con lo que se adelanta el objetivo previsto por el Plan Estratégico para el año 2024.