La confrontación entre las comunidades autónomas por la fiscalidad no es algo nuevo. Sin embargo, esta pasada semana ha vuelto a copar las portadas de todos los medios tras el preacuerdo entre ERC y el Gobierno para la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) en el que los republicanos exigen al Ejecutivo que acabe con el "paraíso fiscal" de Madrid.
Este pacto, que garantiza el 'sí' de ERC a las cuentas públicas, ha causado un enorme revuelo y un nuevo enfrentamiento entre Madrid y Cataluña. Desde la región que preside Isabel Díaz Ayuso insisten en que el 'dumping fiscal' — la competencia desleal — no existe. Javier Fernández-Lasquetty, consejero de Hacienda de Madrid, acusó al presidente del PSOE de querer "freír a impuestos a los madrileños".
Tal y como ha adelantado Vozpópuli, la fórmula para obligar al Ejecutivo a subir los impuestos en la capital es mediante la Ley de Cesión que regula el sistema de financiación de las comunidades autónomas de régimen común y que únicamente requiere de mayoría simple en el Congreso de los Diputados para ser aprobada. Entre otras cosas, la exigencia de ERC pasa por recuperar el Impuesto de Patrimonio en toda España. Actualmente Madrid lo bonifica al 100%.
También el Impuesto de Sucesiones y Donaciones suena con fuerza dentro del plan de ERC de acabar con el 'dumping fiscal'. Este tributo depende de cada comunidad autónoma ya que la normativa a nivel estatal solo fija el modo de calcular la base imponible y la liquidable mientras que las regiones establecen sus propias leyes.
Además de estos citados gravámenes, en la armonización a nivel estatal entrarían también los impuestos de Actos Jurídicos Documentados y el tramo autonómico del IRPF. En este sentido, desde Madrid aseguran que en total esto costaría a los contribuyentes 5.900 millones de euros y defienden que gracias a la política fiscal que se aplica en la región "los más de tres millones de contribuyentes madrileños se han ahorrado 48.000 millones de euros en los últimos 16 años".
Así las cosas, la regulación que exige ERC únicamente afectaría a las comunidades de régimen común y no a las que tiene conciertos especiales, como ocurre con el País Vasco y Navarra, por lo que estas autonomías podrían seguir beneficiándose de las ventajas del Concierto Económico Vasco mediante el cual los parlamentos provinciales tienen competencia para regular los principales tributos.
Volviendo al Impuesto sobre el Patrimonio, si se compara por comunidades autónomas se trata de un gravamen que resulta desfavorable, tal y como se puede comprobar en los siguientes gráficos.
En total, según recoge el Consejo General de Economistas en el documento Panorama de la Fiscalidad Autonómica y Foral, este gravamen llegó a recaudar en 2008 un total en toda España de 2.360 millones de euros, mientras que en 2017 recaudó 1.267 millones de euros. Esto se explica por el mínimo exento de 700.000 euros que se aplica por defecto, por la exención de la vivienda hasta la cuantía de 300.000 euros por contribuyente –ambas medidas comenzaron a aplicarse en 2012– y porque la Comunidad de Madrid lo tiene bonificado al 100%. No obstante, la recaudación de 2017 respecto a la de 2016 se ha incrementado en más de un 4% y en un 12% respecto a 2014.
Los más de tres millones de contribuyentes madrileños se han ahorrado 48.000 millones de euros en los últimos 16 años"
Cataluña
Precisamente, en Cataluña, donde gobierna ERC, se han endurecido los impuestos este año. Se trata de la comunidad autónoma que más exige a las rentas medias y bajas. También es, con diferencia, la que más impuestos propios presenta. Según la normativa autonómica en materia de tributos propios que recoge el Ministerio de Hacienda, actualmente Cataluña acumula un gravamen, cinco cánones y 13 impuestos de diferentes tipos. Por su parte, en Madrid el total es de dos impuestos y un recargo sobre el impuesto sobre actividades económicas (IAE).