Buenos tiempos para las empresas de asesoramiento financiero, más conocidas por las siglas Eafi. A pesar de que nacieron en un período de crisis en el que casi nadie confiaba en su potencial de crecimiento, las cifras vienen demostrando que su ascenso es imparable.
Según los últimos datos disponibles en la CNMV, correspondientes a noviembre del año pasado, las Eafi acaparan ya el 58,4% del total de firmas que prestan servicios de inversión, frente al 19,6% que tienen las sociedades de valores y, con el mismo porcentaje, las agencias de valores.
La clave de esta expansión se encuentra en la reestructuración que atraviesa el sector financiero español, que ha empujado a muchos profesionales a plantearse la posibilidad de montar su propia firma de asesoramiento. Además, las últimas sacudidas que ha sufrido el inversor minorista, como por ejemplo ha ocurrido con el caso de las preferentes, ha situado el asesoramiento financiero en un lugar destacado dentro de las prioridades del ahorrador español.
Un dato a destacar del crecimiento de las Eafi es que solo pueden dedicarse al asesoramiento puro y duro, lo que subraya este aspecto de búsqueda de consejo especializado por parte del inversor a la hora de colocar su patrimonio en determinados activos.
Y este crecimiento de las Eafi parece imparable a la vista de los datos, puesto que son ya 125 las firmas de este tipo registradas en España, frente a las 102 sociedades de asesoramiento que había en noviembre de 2012.
