Ibercaja quiere duplicar su segmento de banca privada hasta alcanzar la cifra de 9.300 millones de euros, de 12.500 clientes, al finalizar 2018, más del doble de las cifras del año pasado. Parte de este crecimiento, según las previsiones de la entidad, se conseguirá mediante la reasignación de los clientes de Ibercaja, que cuentan con un ahorro superior a 300.000 euros, y el resto provendrá de nuevos clientes, el 80% de Madrid, Levante, Burgos y Cataluña, comunidades donde se han puesto en marcha planes de crecimiento específicos.
Para alcanzar este objetivo, Ibercaja pretende impulsar la competitividad en el mercado a través de la creación de un modelo organizativo más eficiente, con la integración de Ibercaja Patrimonios en la estructura del banco, la aplicación en este segmento de su modelo comercial y la definición de la nueva propuesta de valor al cliente. Hasta ahora, la línea de negocio de banca privada se había desempeñado desde la filial de Ibercaja que, desde 1998, desarrollaba su actividad en las oficinas de Zaragoza, Logroño, Barcelona, Madrid, Valencia, Burgos, Badajoz y Sevilla.
En la nueva estructura, el banco incorpora en su red a Ibercaja Patrimonios, Sociedad Gestora de Carteras, lo que permitirá materializar de manera más eficiente, según la firma, las sinergias existentes con las redes gestoras de los segmentos de banca personal y banca de empresas, así como compartir y aprovechar el resto de soportes clave para el negocio de la entidad como son tecnología, la sistemática comercial y la imagen de marca, entre otros.
Además, se incrementará en 40 el número de gestores para esta línea de negocio, hasta alcanzar 78 a finales de 2018.
En los planes establecidos por la entidad para Madrid, Levante, Burgos y Cataluña, la banca privada se ha considerado como uno de los objetivos prioritarios de la entidad. La totalidad de estos planes tiene previsto un incremento en los recursos administrados de los clientes de este segmentor superior a 600 millones de euros, lo que supone un 8,5% del crecimiento de volumen de actividad estimado hasta 2020 para estos territorios. En distintas localidades de estas comunidades ya se han puesto en marcha nuevos centros de banca privada y están previstas más aperturas hasta 2020.