GVC Gaesco, una de las gestoras independientes más activas a la hora de intentar ofrecer productos con valor añadido a sus inversores, ha decidido dar el salto a Luxemburgo con uno de sus fondos estrella, el GVC Gaesco Retorno Absoluto, para intentar atraer a clientes institucionales internacionales.
En una primera fase, la intención es alquilar un compartimento en una sicav ya constituida en el Gran Ducado para abaratar los costes de la operación. Este proceso es muy común entre los inversores profesionales que quieren internacionalizar la comercialización de sus fondos pero que no cuentan con una infraestructura como la que poseen las grandes firmas de gestión. La intención es crear una estructura de fondo principal-subordinado (más conocido en el sector por el anglicismo master-feeder), que permite la normativa, para así aprovechar las sinergias.
En función de la acogida entre los inversores, se irían añadiendo otros fondos de la firma de origen catalán, que GVC Gaesco considera que también podrían tener un atractivo para el inversor internacional. Y, una vez que se hubiera alcanzado un volumen óptimo de patrimonio, en la gestora se plantearían montar su propio vehículo de inversión registrado en Luxemburgo.
GVC Gaesco es un caso especial entre los fondos de retorno absoluto, pues nació de la colaboración con un grupo de expertos de la Universidad de Barcelona. La intención era encontrar un modelo que sistematizara las ineficiencias detectadas en el mercado y que pudiera predecir su comportamiento en el futuro, para lo que se consideraron períodos de hasta 25 años mínimo en las proyecciones históricas de cada ineficiencia.
Fruto de esta investigación se han desarrollado hasta 16 estrategias, que pronto serán 17, que se van aplicando en la gestión del fondo en función del momento del mercado. Este trabajo se complementa con 61 técnicas de inversión y se va actualizando constantemente. La eficiencia demostrada por este modelo desde el lanzamiento del fondo en 1992 ha sido clave a la hora de considerar la opción de comenzar la internacionalización con él.
El fondo, que tiene un objetivo de rentabilidad anualizada del 8,6% con una volatilidad del 6,9%, ha tenido muy buena acogida entre los analistas profesionales por su transparencia, gestión y buenos resultados, porque muchos fondos de retorno absoluto no cumplen con característica principal de este tipo de productos: contener las caídas en los momentos de bajada del mercado y adelantarse a las subidas, pero con un control estricto de la volatilidad.
GVC Gaesco Retorno Absoluto cuenta con un patrimonio de tan solo 55 millones de euros, un inconveniente que le impide dar el salto internacional con el registro de una sicav propia sin que los costes terminen repercutiendo en los inversores, algo que los responsables de la gestora quieren evitar mediante el alquiler de un compartimento de una sociedad ya existente.