Ford ha decidido finalmente presentar la solicitud de ayudas en la segunda convocatoria del Perte destinado al coche eléctrico y las baterías. Por ello, sin embargo, se van a retrasar las decisiones desde la matriz respecto a la planta valenciana y las inversiones necesarias para la instalación de la plataforma eléctrica en esta factoría.
La dirección europea de Ford así se lo ha trasladado al comité de empresa de Ford Almussafes, cuyo presidente, Carlos Faubel, ha mantenido una última reunión este miércoles en la sede de la multinacional en Colonia (Alemania), con el Comité de empresa europeo y con representantes de Ford Europa, acompañado de la dirección local de Almussafes.
Según Faubel, existe el compromiso de la dirección europea de que Ford presentará candidatura al Perte VEC, que está dirigido a dos bloques, uno relacionado con el programa de baterías, por un importe superior a los 800 millones de euros, y otro, con proyectos individuales con impacto en la cadena de valor del vehículo eléctrico y conectado.
Respecto a las baterías, la intención es ampliar o instalar una nueva planta de montaje de baterías ya que la actual de la factoría de Almussafes destinada a los actuales modelos híbridos enchufables es de capacidad limitada, según ha explicado a Efe Faubel.
Por otra parte, desde la dirección de la multinacional en Detroit (Estados Unidos) se está retrasando la toma de decisiones sobre la apuesta de negocio definitiva, de la que derivarán las inversiones, unas decisiones que estarán también condicionadas a las futuras subvenciones del Perte.
Falta de ideas
Para el dirigente sindical, este retraso va a tener efectos en las estimaciones de inversiones que afiancen el futuro de la fábrica valenciana y en la clarificación de los plazos. En este sentido, las partes han acordado un calendario de reuniones a partir de septiembre para compartir las noticias y decisiones que adopte la compañía.
Según Faubel, la candidatura al Perte es una señal positiva pero "no hay claridad y certeza" en cuanto a las decisiones de inversión, que espera se adopten en el último trimestre de este año. "Nos gustaría estar en otro escenario" más avanzado, ha comentado el responsable de UGT.
Ya la semana pasada, UGT Ford, mayoritario en la planta de Almussafes, advirtió del retraso en la toma de decisiones y de la consiguiente puesta en marcha de acciones que acompañen los planes de futuro.
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Un adiós que estaba previsto inicialmente para 2024, pero que se ha adelantado casi un año como consecuencia de la transformación que está acometiendo la marca en sus modelos encaminada hacia la electrificación. Hace más de un año que Ford anunció que la de Almussafes era la planta elegida para construir la nueva plataforma eléctrica de Ford para Europa.