Denuncian que los altos funcionarios dedican parte de su jornada a impartir numerosos cursos y charlas. En este sentido, creen que esta dedicación más que "ocasional" es "sistemática". Y recuerdan que aunque esos cursos fueran inocuos, "están dedicando mucho tiempo". Inciden en que son puestos de libre designación "muy bien pagados", con "incentivos al rendimiento".
Por este motivo instarán mediante un escrito al Ministerio a que investigue tanto el contenido del centenar de cursos que les generan sospechas, así como el alumnado que asiste a ellos. "La inspección tanto del Ministerio como de la Agencia Tributaria debería haber preocupado por estas cuestiones", asegura en declaraciones a este diario el secretario general de Gestha, José María Mollinedo. En este sentido, pone en cuestión la actuación de estos servicios. "No confiamos demasiado en la capacidad para depurar a personas de confianza", explica.