Hace solo unas semanas la Comisión Europea propuso una reforma del IVA para dar más libertad a los estados a la hora de fijar los tipos generales y reducidos del impuesto. Incluso se mostró partidaria de fijar un tipo 0% para determinados productos. A España no le gusta la propuesta y con razón, la nueva definición podría obligar al Gobierno a subir de nuevo el tributo.
La normativa actual obliga a los países a establecer un tipo general de al menos el 15%, se les permite fijar un tipo reducido no inferior al 5% a dos categorías de productos y, a algunos países concretos, se le permite aplicar tipos superreducidos. Este es el caso de España, donde hoy el IVA tiene un tipo general (21%), uno reducido (10%) y uno superreducido (4%).
Según la Comisión, estas diferencias generan muchas distorsiones y conviene armonizar el impuesto. Por eso y tras renunciar a contar un IVA único en toda Europa, propone dar más libertad a los estados a la hora de fijar los tipos generales y reducidos. Pero a España no le gusta esta propuesta.
En concreto, el nuevo planteamiento de la Comisión permitiría a los diferentes estados fijar hasta 4 tipos de IVA: el general, que sigue teniendo que ser superior al 15%, dos reducidos que podrían ir entre el 5% y el tipo general y uno superreducido de entre el 0% y el 5%. Hasta ahí todo bien, el problema está en que, para proteger los ingresos públicos, el tipo medio ponderado de todas las transacciones susceptibles de llevar IVA tiene que superar siempre el 12%.
Según un informe de Funcas el tipo efectivo medio del IVA podría estar en el 9%
Y es esto lo que puede suponer un problema para España. Si hacemos la media, el tipo está hoy en el 11,6% y si queremos ver el tipo efecto la cosa se complica un poco. Y es que no existe una forma concreta de medir el tipo medio efectivo del IVA en la normativa española, pero algunos estudios apuntan a que está por debajo de ese umbral. Y eso podría obligar a subir de nuevo el impuesto. Por ejemplo, la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas), ha publicado recientemente un estudio en el que lo sitúa en el 9%.
¿Cómo hace este cálculo Funcas? Utiliza la Encuesta de Presupuestos Familiares y a partir de ahí calcula la carga fiscal efectiva a la que se han enfrentado los ciudadanos. Según sus cifras, el tipo medio efctivo del IVA ha pasado del 7,57% en 2007 al 9,05% en 2015, ya que durante estos años de crisis el impuesto se ha subido más que nunca en la historia.
Y hace casi un año, ABC publicó un informe de la propia Comisión Europea que hacía este mismo cálculo dividiendo la base imponible del tributo entre la recaudación en cada estado. Según esta metodología, España cuenta con el tipo medio efectivo más bajo de la Unión Europea, de un 8,6%, por debajo de la media europea que está en el 12,6%.
¿Otra subida?
Si damos estas cifras por buenas, el tipo medio ponderado está casi medio punto por debajo de que va a exigir la UE y el tipo efectivo tres puntos por debajo. De una forma o de otra, habría que subir de nuevo el tributo. O pasar algunos productos de los tipos reducidos al general, una petición que han hecho a España en numerosas ocasiones la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Desde la Agencia Tributaria aseguran que no hay un cálculo concreto sobre el tipo efectivo del impuesto y nos remiten a otro dato que hoy está en el 15,3%, pero especifican que en ningún caso se puede decir que es el tipo efectivo, así que puede que la fundación de cajas no esté muy desencaminada.
El Gobierno no comparte la propuesta, pero su argumento no se sostiene mucho
Eso explicaría también el rechazo del Gobierno a la propuesta de Bruselas. Hace solo unos días, el minsitro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, dijo que España "no está absolutamente en contra", pero considera que los tipos reducidos deben aplicarse a las "excepciones" y no ser una regla general.
Es curioso que haga esta afirmación teniendo en cuenta que España es de los pocos países que tiene un IVA superreducido, así que la nueva propuesta no afectaría mucho al país en este sentido. Otra cosa sería que las cifras de Funcas y la propia Comisión fueran ciertas y que el IVA de España esté hoy por hoy a tres puntos de ese 12%. Definitivamente, esosí afectaría al Gobierno.