Todos los grupos parlamentarios tendrán oportunidad de enmendar la reforma hipotecaria en el Congreso puesto que el Gobierno ha decidido tramitarla como proyecto de ley por petición expresa del Partido Socialista. En esta reforma se ha renunciado a introducir otro indicador de referencia diferente al euribor en los contratos hipotecarios, algo a lo que se ha opuesto el PSOE, por lo que se dejará la iniciativa a las entidades financieras.
El Gobierno tramitará la reforma como proyecto de ley para que todos los grupos puedan presentar enmiendas
Las fuentes que han intervenido en esta negociación ven tres vías posibles para que la banca vea satisfecha esta demanda y pueda volver a sacar rentabilidad al negocio hipotecario: la Asociación Española de Banca (AEB), la Autoridad Bancaria Europea (ABE) y el propio Banco Central Europeo (BCE). “La nueva ley hipotecaria no es el marco idóneo para introducir otro tipo de referencia para la mayoría de las hipotecas porque eso traería muchos problemas. La iniciativa aquí la tienen que tomar los bancos sin que el Gobierno intervenga”, aseguran estas fuentes.
Las conversaciones mantenidas por el Ejecutivo con el PSOE para sondear esta posibilidad no han prosperado, una vez analizadas las implicaciones directas de esta medida. Sí lo han hecho otros extremos de la reforma, por lo que tras su próxima aprobación por el Consejo de Ministros, ésta llegará al Congreso prácticamente cerrada con los socialistas y con Ciudadanos, a expensas de la negociación que se abra con otros grupos parlamentarios más pequeños cuando se inicie el trámite de enmiendas parciales.
Alto coste político
Las fuentes consultadas no disimulan el alto coste político que hubiera tenido avalar las demandas de la banca en esta dirección ya que el objetivo final de sustituir el euribor por otro indicador es encarecer las hipotecas y volver a sacar beneficio a este importante nicho de negocio. El índice en cuestión se mantuvo en negativo durante todo el año pasado, periodo que varias entidades aprovecharon para pedir al Gobierno que pusiera más de su parte para fortalecer el sistema financiero. Lo primero que hizo fue ponerse en contacto con el PSOE para compartir el coste político, sabiendo que después de la sentencia del Tribunal de la UE sobre las cláusulas suelo la posibilidad de alcanzar un acuerdo era remota.
El PSOE opina que el cambio del euribor debe canalizarse a través de la AEB, la ABE o el BCE
“En realidad, lo fundamental es que se introduzca la máxima transparencia en el mercado hipotecario para homogeneizarlo en toda la Unión Europea aprovechando la transposición a nuestra legislación de la directiva comunitaria que busca unificar la regulación de este tipo de contratos. Todo lo que sea salirse de este marco no es conveniente”, señalan las fuentes.
