El Gobierno aprobará en el último Consejo de Ministros del año, el viernes 28 de diciembre, una subida del 7% en las bases máximas de cotización, lo que supone que las empresas tendrán que pagar 1.000 euros más al año por los trabajadores que más cobran y ellos mismos tendrán que abonar 200 euros anuales más en cotizaciones a la Seguridad Social, según cálculos de la CEOE.
¿Qué significa esta medida? La base máxima de cotización (que actualmente es de 3.803,7 euros al mes o 45.644,4 euros al año) es sobre la que calcula la Seguridad Social cuánto deben pagarle los empresarios y trabajadores, de forma que todos aquellos que cobran más de esa cantidad sólo cotizarán por los primeros 3.803,7 euros de salario mensual, quedando el resto exento.
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) informó en octubre de que el Gobierno estaba barajando subir la base máxima de cotización entre un 10 y un 12%, lo que despertó las críticas de la patronal por el incremento de costes laborales que supondría esa decisión para las empresas.
La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, se mostró más prudente la semana pasada al apuntar que ese porcentaje se situaría por debajo del 10%, y este martes Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, ha adelantado que la subida al final se quedará en el 7%, una cifra que confirmaron a Vozpópuli fuentes del Ministerio.
La CEOE estima que un incremento del 7%, equivalente a 266,21 euros al mes, supone que las empresas gastarán 85,57 euros más al mes por cada empleado en ese umbral de salario, mientras que cada trabajador pagará 16,66 euros más cada mes.
En el cómputo del año, los costes para los empresarios se incrementarán en 1.026,84 euros, mientras que para los empleados el aumento será de 199,92 euros.
Impacto en las arcas públicas
En total en España existen 1,06 millones de empleados que cotizan por la base máxima de cotización, según los datos de la patronal, por lo que el gasto agregado de todo el tejido empresarial español será de 1.026 millones de euros y el de los trabajadores que cobran rentas más altas de 199,92 millones, que se destinarán a las maltrechas arcas de la Seguridad Social.
Si el Estado hubiera subido las bases un 10% -tres décimas más- su recaudación habría sido superior, pero habría indignado todavía más a la CEOE, que ya ha alertado de que la medida supondrá una destrucción de puestos de trabajo.
La patronal lamenta que el coste laboral para las empresas en España es muy elevado, de hecho, la recaudación que hace el Estado por cotizaciones sociales de las empresas representa un 8,2% del PIB, frente al 6,8% que supone en la media de la Unión Europea (la cuota que pagan los empleados, por el contrario, contribuye con un 3,2% al PIB, dos décimas menos que la media de la UE).
El Instituto Nacional de Estadística ha publicado este martes que en el tercer trimestre de 2018 los costes laborales de las empresas han aumentado un 1,9% interanual, lo que supone el mayor incremento en cinco años.
El coste salarial por trabajador y mes (que incluye salario base, complementos, pagos por horas extraordinarias y atrasos en términos brutos) ha aumentado también el 1,9 %, hasta alcanzar los 1.842,6 euros de media.