Uno de cada tres hogares en España sólo podría sobrevivir tres meses si pierde su principal fuente de ingresos -generalmente, el sueldo- por la situación económica de crisis que atraviesa el país tras el impacto del coronavirus.
Así se desprende de un informe sobre vulnerabilidad financiera elaborado por BBVA Research, en el que la entidad advierte de la importancia de medir este indicador para conocer la capacidad de la sociedad de afrontar un shock como el que está viviendo la economía española.
"Una forma de medir la vulnerabilidad financiara es a través del tiempo que los hogares son capaces de cubrir sus costes de vida en caso de dejar de recibir su principal fuente de ingreso, sin recurrir al crédito ni cambiar de vivienda", explican. Por costes de vida consideran el gasto en alimentación, electricidad, agua, pago de préstamos (incluidos préstamos con familiares), móvil, gastos de comunidad de vecinos, colegio, universidad, seguros, etc.
Según sus resultados, un 16,8% de los hogares del país podrían aguantar sin ingresos entre uno y tres meses, un 8,7% aguantaría como máximo un mes, mientras que un 7,7% sólo podría sobrevivir sin ese ingreso como mucho durante una semana.
Existen factores que incrementan el impacto negativo de esta crisis, como ser mujer, tener un reducido nivel de educación y ser joven, así como formar parte del grupo de trabajadores con bajos ingresos
"Los confinamientos por la covid-19 y la crisis subsiguiente han ocasionado que muchos individuos dejen de trabajar o reduzcan sustancialmente sus horas de trabajo. Frente a un shock de este tipo, que implica una merma o pérdida de la principal fuente de ingresos, el análisis de la vulnerabilidad financiera de los individuos u hogares, entendida como su capacidad para mantener su nivel de gasto corriente ante la pérdida de ingresos, cobra especial relevancia", explican los expertos de la entidad.
Como reducir esa vulnerabilidad
Advierten de que este nivel de vulnerabilidad está muy relacionado con el grado de desarrollo del país, pero también con otras características. Según un estudio al que hacen mención, "existen factores que incrementan el impacto negativo de esta crisis, como ser mujer, tener un reducido nivel de educación y ser joven, así como formar parte del grupo de trabajadores con bajos ingresos".
Para reducir la vulnerabilidad financiera de los hogares, el servicio de estudios de BBVA recomienda, además de aplicar sistemas de protección de rentas como los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), fomentar la educación financiera y la planificación.
"La reducción de la vulnerabilidad financiera no es sólo una cuestión de mayores ingresos. La resiliencia
financiera se relaciona también con el manejo de las finanzas personales a lo largo del ciclo vital. Para ello se necesitan políticas estructurales que promuevan entre los hogares la planificación del futuro de forma
consciente", apuntan.