Tressis es una sociedad de valores independiente de gestión de patrimonios y planificación financiera que ya gestiona más de 3.900 millones de euros. Su directora de renta variable, Virginia Pérez, lleva en el equipo desde 2011 y defiende 100% el modelo de negocio de Inditex.
Desde su posición ve a la compañía como un ejemplo a seguir y no duda cuando afirma que el modelo es "único e irrepetible". Además, destaca positivamente la forma en la que la empresaa de Amancio Ortega ha sabido evolucionar hacia el modelo online.
Las ventas por este canal y la estrategia integrada en las tiendas son dos de los pilares fundamentales de la empresa, según Pérez, que califica el modelo como "bárbaro" y recuerda a todos aquellos que dudan, que "las ventajas competitivas no desaparecen de la noche a la mañana".
Aún así, reconoce que Inditex no lo hizo del todo bien cuando presentó sus últimos resultados. Abanderada de la transparencia, la experta critica duramente la decisión de la compañía de sólo avisar a "unos cuantos analistas" sobre las dificultades que se había encontrado en el último trimestre.
Un traspiés que provocó una caída muy importante en el precio de la acción y que la dejó a unos niveles "muy atractivos" para Tressis. "Hacía tiempo que buscábamos Inditex, pero estaba muy cara", asegura.
Tressis también apuesta muy fuerte por las compañías tecnológicas. Virginia Pérez asegura que tienen una exposición muy elevada a este sector y que se centra, sobre todo, en compañías americanas o que cotizan en Nueva York, como es el caso del gigante del comercio electrónico Alibaba.
"Nosotros la preferimos a Amazon. Alibaba tiene una mejor valoración y además, al número de personas que llega es tan amplio o más que el de la compañía americana", valora.
Alibaba tiene mucho que hacer y que decir
El gigante asiático llega a más de 1.400 millones de chinos y su plataforma también es utilizada en America y Europa. A esto hay que sumarle la potencial clase media china, que "no para de crecer" y que favorece enormemente a la empresa.
La banca
Cuando se habla de banca, prefiere mirar al otro lado del charco. "El sector en Europa no está tan claro como en Estados Unidos", lamenta. El motivo que da la directora de renta variable es que el BCE tiene ahora un papel muy complicado que afrontar.
"La próxima subida de tipos que tiene que realizar es muy importante porque tiene que comenzar a crear herramientas para cuando las cosas se compliquen. Ahora el BCE no tiene nada", subraya.
En el terreno español, aunque le cuesta encontrar claras virtudes en general, alaba el buen hacer de los dos bancos liderados por mujeres. Bajo su criterio, el Santander, que lo tiene en cartera, y Bankinter son las dos entidades mejor gestionadas en España. "Son un ejemplo", recalca.
En el caso de Bankia, la cosa cambia. "No me gustan esas incertidumbres que pesan en los valores", expresa Pérez, después de hablar del precio de la acción de Bankia y de su próxima privatización. Su poca diversidad geográfica y el fuerte peso del Gobierno en la compañía son los mayores problemas que ve ahora en el valor.
España - Alemania
Como ya ha quedado claro, si hay algo que no le gusta a la experta es la opacidad y la incertidumbre. Dos defectos que ahora definen a la perfección a Siemens Gamesa.
La guerra entre Iberdrola y Siemens Gamesa no nos gusta nada
"Una de las cosas buenas que tenía Gamesa, a parte de su negocio y su mercado hacia emergentes, era como transmitían los directivos para inversores y analistas. Estábamos acostumbrados a saber todo de la compañía pero llego Siemens y esa transparencia desapareció. Por eso, nos gustaba más como Gamesa".
¿Ibex a 11.000?
La directora de renta vairable considera que el Ibex aún tiene mucho recorrido y no sería una locura verlo por encima de los 11.000 puntos antes de que cierre el año. Bajo su punto de vista, la clave está en los resultados de las empresas europeas, que en el primer trimestre se han visto lastrados por el efecto divisa, pero que repuntarán a cierre del primer semestre.
Aún con ello, alerta de que hay que estar muy atentos de la política monetaria, porque ahora mismo es "el factor que más puede lastrar a las compañías".