La tasa de inflación interanual de la zona euro se ha situado en marzo en el 1,3% desde el 0,9% registrado en febrero, lo que representa el mayor incremento de los precios desde enero de 2020 como consecuencia del impacto de la evolución de los precios de la energía, según la primera estimación del dato publicada por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
El repunte de los precios en marzo obedece al impacto de la evolución de la energía, que en el tercer mes de 2021 se apreció un 4,3% interanual, frente a la caída del 1,7% observada el mes anterior, mientras que los alimentos frescos se encarecieron un 1,5%, en línea con la subida de febrero, y los servicios subieron un 1,3% interanual, una décima más que en el mes anterior.
De su lado, el coste de los bienes industriales no energéticos registró en marzo una subida interanual del 0,3%, por debajo del encarecimiento del 1% observado el mes anterior.
Luxemburgo, Austria y Alemania
De este modo, al excluir el impacto de los precios de la energía, la tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en el 1%, dos décimas por debajo del dato de febrero.
Al dejar fuera también del cálculo el efecto de los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente de la zona euro se ha moderado en marzo al 0,9% desde el 1,1% de febrero.
Entre los países cuyos datos estaban disponibles, únicamente Grecia ha registrado en marzo una bajada de los precios, con un retroceso interanual del 2%, mientras que Irlanda, Chipre, Portugal y Eslovenia registraron cada uno una subida del 0,1%.
De su lado, las mayores subidas de precios en marzo se observaron en Luxemburgo, con un alza del 2,4%, por delante de Austria y Alemania, donde la tasa de inflación interanual se situó en el 2% en ambos casos.
En cuanto a España, la tasa de inflación armonizada se ha situado en marzo en el 1,2%, frente al -0,1% registrado en febrero, lo que ha reducido a solo una décima el diferencial de precios favorable al país respecto de la eurozona.