Catorce meses después de su puesta en marcha, el Gobierno ha rechazado tres de cada cuatro solicitudes del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Así lo ha admitido el Ejecutivo en su respuesta a una batería de preguntas registrada por el senador de Compromís Carlos Mulet, a la que ha tenido acceso Vozpópuli.
Según los datos aportados en esa respuesta, el Gobierno ha aprobado 330.000 de las 1,4 millones de solicitudes recibidas desde que se puso en marcha esta prestación. Unas cifras que el propio Mulet califica como "fracaso". Cuando se aprobó el decreto-ley por el que se activó el Ingreso Mínimo Vital, en mayo de 2020, el Ejecutivo afirmó que la medida beneficiaría a 850.000 hogares y 2,3 millones de personas.
De las 1,4 millones de solicitudes recibidas se han tramitado cerca del 85%, mientras un 15% siguen sin tramitarse, por lo que solamente han sido aprobadas el 23,57% de las solicitudes. Según la respuesta del Ejecutivo, entre las principales causas de denegación está el incumplimiento del requisito de vulnerabilidad económica, es decir, superar los umbrales de renta y patrimonio que estipula el Real Decreto-ley 20/2020, de 29 de mayo, por el que se establece el Ingreso Mínimo Vital.
"Esto demuestra que el RD marcó unos umbrales que dejaban fuera a la mayoría de la gente que necesita este tipo de ayudas. Además de la insensatez de que los datos para denegar estas ayudas sean los ingresos del año anterior; más después de la hecatombe social de la COVID donde muchísima gente con ingresos normales durante 2019 o principios de 2020 a partir de la crisis sanitaria quedó sin ingresos , pues a esa gente se la ha dejado desampara", señala Mulet.
Prestaciones de tan solo 10 euros al mes
En su respuesta, el Gobierno admite que el IMV no reconoce una cuantía fija, sino que "tiene una configuración diferente a la hasta ahora habitual en las prestaciones no contributivas, de ahí que puede haber prestaciones de 1.033,85euros/mes y otras de 10 €/mes, todo depende de la composición de la unidad de convivencia y del resto de rentas de dicha unidad, así como los ingresos de partida". "No obstante, la medida de cuantía por unidad de convivencia se sitúa en torno a los 450 euros/mes", asegura el Gobierno.
Para el senador de Compromís, "el fracaso" del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, parte de que no haya atendido a las comunidades autónomas que querían gestionar coordinadamente el IMV, opción que solamente ha explorado con Navarra y País Vasco. "La arrogancia en la gestión lleva al fracaso, y eso, cuando estamos hablando de una medida tan necesaria como el Ingreso Mínimo Vital a quien no tienen nada o poco, es intolerable", ha denunciado Mulet.