Nuevo choque en el juicio del caso Bankia. Tras las 19 horas de declaración de Francisco Celma, le ha llegado el tuno a Bankia, que ha comenzado desmintiendo una afirmación que hizo hasta la saciedad el socio auditor de Deloitte.
Según Álvaro Hernando, representante de la entidad, Celma "dispuso de las cuentas en todo momento" y pudo hacer un informe de auditoría y "no lo hizo". Además, ha agregado que el auditor trabajó en ellas hasta el momento de la formulación y ha recordado que su contrato le obligaba a emitir dicho informe.
La defensa de Bankia ha concluido su breve defensa subrayando que las cuentas reformuladas sólo sufrieron cambio en las estimaciones y que en el resto de líneas eran "las mismas".
Hernando también ha querido aclarar que la exconsejera Araceli Mora nunca se opuso a la formulación de dichas cuentas, tal y como afirmó la acusada a la fiscal en su interrogatorio. "La señora Mora elaboró un texto en el que no hay ninguna oposición a elevar las cuentas al consejo, sólo se oponía a renovar el contrato del auditor", ha declarado Bankia.
Asimismo, el representante legal de Bankia ha querido recalcar que la CNMV sí revisó las cuentas con las que se realizó el folleto de la salida a Bolsa y ha enfatizado en el hecho de que el regulador pidió cambios por lo que tuvo trabajó de forma activa con la entidad.
Plan de recapitalización
Hernando se ha referido también al plan de recapitalización de Bankia aprobado por el Banco de España el 17 de abril de 2012, que no tiene nada que ver con el denominado "plan Rato", que la entidad no reconoce como propio.
Dicho "plan Rato,", ha explicado Hernando, no fue presentado ni sometido a los órganos de gobierno de la entidad, por lo que ésta no tuvo oportunidad de pronunciarse; era una "posición del señor Rato que no tenía reconocimiento de las autoridades, en absoluto".
Se trató, ha indicado, de un "plan efímero" porque duró "unas pocas horas".