"Todas las personas podemos ser imparables. Solo hay que saber cómo hacerlo". Quien habla es Marina de los Ríos, una de las 40 jóvenes que ha participado en la segunda edición del programa Jóvenes y Liderazgo #ChicasImparables que se ha llevado a cabo entre el 30 de enero y este 27 de febrero en el campus de ESADE en Madrid. El objetivo: impulsar el liderazgo femenino.
Para ello, las estudiantes de entre 16 y 18 años han tenido que emprender creando sus propios proyectos basándose en las finanzas, la tecnología y la comunicación y el marketing. También, fundamentalmente, trabajando en equipo para sacar adelante los trabajos que han defendido ante grandes líderes de diferentes sectores como Antonio Garamendi, presidente de la de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), o Irene Cano, directora general de Facebook España.
Que vean que no se tienen que poner límites, que pueden soñar a lo grande
El curso, promovido por la consultora 50&50GL y Fundación CEOE, surgió para “romper con la tendencia de asignar los liderazgos a los hombres” y también para que las jóvenes descubran sus habilidades, desarrollando sus competencias y ganando autoconfianza. "Que vean que no se tienen que poner límites, que pueden soñar a lo grande, que pueden ser lo que ellas quieran y que aunque tengan dudas se pongan y lo hagan, que no piensen desde pequeñas que hay cosas de niñas y de niños", señala en conversación con Vozpópuli Gloria Lomana, presidenta de 50&50GL.
Para Elena Vicario, alumna de la primera edición de este curso, la oportunidad supuso la experiencia "más enriquecedora" que ha vivido hasta el momento: "El curso dio alas a mi creatividad. Un año después sigo pensando la gran oportunidad que tuve y todo lo que aprendí". Actualmente está estudiando una ingeniería en el extranjero y asegura seguir aplicando las enseñanzas obtenidas en el programa.
"Todas las personas podemos ser imparables"
Con Elena coinciden Marina de los Ríos y Fariana Pavón, alumnas de esta segunda edición. Nerviosas a solo unos días de presentar sus proyectos ante el jurado, narran a este diario su experiencia. "Aprendes a potenciar tus capacidades, incluso las que pensabas que no tenías. Son cosas que si yo no hubiera aprendido aquí, no habría imaginado que puedo hacer", señala Marina. "Todas las personas podemos ser imparables", añade.
Ambas destacan la importancia de haber trabajado en equipo y hacer networking. También haber podido conocer de cerca casos de mujeres que ocupan puestos directivos como Irene Cano o María Helena Antolín, vicepresidenta del Grupo Antolín. "Escuece que te cuenten casos reales. Una sociedad machista no se esperaría que llegasen hasta ahí", apunta Fariana.
Este sábado terminan el curso con la presentación de sus proyectos ante el jurado. El grupo en el que está Fariana ha fijado su objetivo en concienciar a la gente sobre el desperdicio de ropa a través de una app. En el caso del de Marina, normalizar y visibilizar las enfermedades mentales empleando herramientas de marketing y comunicación. Así ponen fin a unas semanas de formación en liderazgo que han exprimido al máximo. Lo que seguro que no concluye es todo el aprendizaje que estas 40 jóvenes se llevan tras su participación en el mismo.
JARTOMANGANTES
Una civilización se va a la porra, cuando ya no se habla de personas, ciudadanos, sino de mujeres/hombres/lgbijñlg/trans, trins, fluidos, etc. y por supuesto, los xy pagapensiones y nasios pa pagá, no están incluidos en los beneficios de estas nuevas leyes. RIP occidente gracias a la progrhez.
yon
A las mujeres se las hace jafas porque no saben currar, casos a montones y después se dice que son muy listas, y tanto, después de 40 años de privilegios seguimos con esto
PacoBolero
Pero si lo que nos sobra es gente que manda