El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, han anunciado por separado que el Gobierno concretará su reforma sanitaria en un plazo de dos semanas. Por delante queda sentarse a negociar con las Comunidades Autónomas las políticas de ahorro que se pondrán en marcha.
El titular de Hacienda rechazaba en una entrevista en Radio Nacional de España la palabra 'recorte' para referirse a las medidas anunciadas ayer en los sectores sanitario y educativo. Montoro prefiere denominarlo "ajuste o ahorro", ya que insiste en la idea de que el ciudadano medio no va a sufrir cambios en el servicio recibido.
También ha explicado que pese a haber pillado por sorpresa a la Opinión Pública, esta medida lleva gestándose desde hace mucho tiempo y que lo que falta es consensuarla con las Comunidades Autónomas.
"Si se anuncia una cifra de ahorro concreta, es porque se ha calculado y está sustentada en datos contrastados. No se pudo presentar en los Presupuestos Generales del Estado porque las competencias están transferidas a las CC.AA.", explica.
Cristóbal Montoro ha dejado entrever que se incluirá un sistema de progresividad en el acceso a los fármacos, alegando que “todos los ciudadanos tenemos que contribuir a reducir el déficit del sistema en función de nuestras capacidades". También ha mencionado que España deberá redefinir la cartera de servicios básicos en Sanidad para evitar los "abusos existentes, como el turismo sanitario o el malgasto farmacéutico".
Por último, el ministro de Hacienda ha ironizado sobre la polémica que rodea al copago sanitario. "El copago ya existe en España, ya pagamos por las recetas, parece que estemos inventando la pólvora", ha defendido Montoro.