La sesión en los mercados sólo podía ser demencial, ya que antes de que abrieran las Bolsas o la deuda, el Banco Central Europeo (BCE) y Alemania (tanto monta) habían lanzado un recado a España a través de los diarios económicos más prestigiosos: no van a tolerar rescates a Bankia con más deuda pública para colateralizar en la institución que preside Mario Draghi. Así las cosas, la palabra “rescate” ha sido el catalizador, lo que se ha traducido en una sesión de pesadilla.
La prima de riesgo ha tocado los 540 puntos básicos, el bono a 10 años finalizó en el 6,63%, aunque peor es lo que ocurre en el tramo corto: el 5 años también superó el 6% y el 3 años se dirige raudo a esa zona. Los expertos insisten en que cuanto más se aplana la curva a corto, más se reduce la posibilidad de emitir del Tesoro.
Conviene recordar también que, a pesar de que el posible rescate era la principal preocupación de los inversores, los países que ya han recibido asistencia financiera europea (Portugal, Irlanda y Grecia) no han mejorado de manera sensible su prima de riesgo.
Nuestros vecinos tienen el 10 años al 12,1%, Irlanda al 8,2% y el rendimiento de Grecia, directamente, se anecdótico: el 29,19%.
Ahora mismo, los mercados descuentan que el fondo de rescate EFSF pueda inyectar dinero directamente en los bancos, algo que el Gobierno lleva reclamando desde hace tiempo, de manera más o menos clara.
Rajoy no quiere que se considere la banca española como un elemento sistémico dentro del Euro, sino que se creen los mecanismos de defensa precisos. La Eurozona sufre un ataque y España es ahora mismo la parte más débil de la cuerda. Es por donde puede romperse, pero si se le da el corte, caerán todos los países, consideran en Moncloa.
Desde Bruselas llegan mensajes más o menos amables en este sentido, cosa que no ocurre desde Alemania ni tampoco desde el BCE. Los mensajes cruzados desde el Financial Times son buena prueba de ellos.
Pero, o se implementa la ayuda financiera desde el exterior o el banco central deberá intervenir para frenar este desastre que está haciendo desangrar la economía española en un agónico goteo.
Panorama desolador en Bolsa
En Bolsa, el Ibex mantuvo in extremis los 6.000 puntos, quedando en 6.090, pero se dejó un 2,58%, siendo el peor de la eurozona, por supuesto. Las principales plazas no estuvieron mucho mejor: París se hundió un 2,42%, Frankfurt un 1,8% y Milán un 1,79%. Londres, un 1,73%.
La sucesión de valores en el Ibex al cierre era desoladora. Sólo Red Eléctrica (0,80%) escapaba de las pérdidas. Pero en el lado contrario, Sacyr con un 11,18% y Bankia, con un 8,6% lideraron el varapalo.
Resulta demoledor ver una Bolsa española en la que sólo Inditex supera los 40.000 millones de euros en capitalización. Santander, la segunda mayor empresa, cerró un 1,1% en negativo y vale 39.785 millones. Telefónica sigue muy duramente castigada. Se hundió otro 3,47% y cae un 26,5% anual. Su capitalización es de 39.634 millones. El Ibex pierde un 28,9% anual, siendo, por supuesto, el peor índice europeo. Le sigue Milán, pero sólo con un 14% a la baja.
El euro pierde los 1,24 dólares ante los problemas de los bancos de España
El euro ha mantenido su fuerte depreciación frente al dólar y ha perdido los 1,24 dólares, el nivel más bajo desde el 1 de julio de 2010, ante los problemas del sector bancario de España.
La moneda única se cambiaba hacia las 15.00 horas GMT a 1,2396 dólares, frente a los 1,2539 dólares el martes por la tarde.
Los problemas de Bankia y la incertidumbre sobre el sector bancario español han intensificado la aversión al riesgo entre los inversores y han lastrado la cotización del euro, ha dicho la experta en divisas de Commerzbank Antje Praefcke a la agencia Efe.