La agencia de calificación Moody's ha advertido de que la imputación de BBVA por el 'caso Villarejo' expone al banco a un daño reputacional y podría, en última instancia, afectar negativamente a su solvencia.
Así lo señala la firma de rating en un comentario emitido con fecha 31 de julio tras conocerse la imputación del banco por parte del juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón por cohecho, corrupción y revelación de secretos en el conocido como 'caso Villarejo'.
"Aunque es demasiado pronto para evaluar a qué acción del regulador, si la hubiera, podría enfrentarse el BBVA, la acusación expone al banco a daños en la reputación y, en última instancia, podría afectar negativamente a su solvencia", afirma Moody's.
Para la agencia, la decisión expone a BBVA, el segundo mayor banco español y calificado con rating 'A2/A3', a una "potencial" medida por parte del regulador y a un daño reputacional y a una perspectiva negativa en su crédito. No obstante, deja claro que la investigación no implica que la entidad haya sido acusada formalmente de haber cometido un delito.
Moody's señala que la calidad en la gobernanza es "particularmente importante" para los bancos, habida cuenta de que operan con un elevado apalancamiento y son generalmente más sensibles a la confianza que las empresas no financieras, particularmente teniendo en cuenta su esquema de financiación.
Más allá de una potencial multa
"Las consecuencias de un fallo en el gobierno corporativo podrían ir más allá del efecto inmediato de una potencial multa. Un error en la gobernanza también distrae la atención del equipo directivo, así como los recursos, otro punto negativo para su perspectiva crediticia", advierte.
Moody's cree que es difícil estimar la magnitud de las potenciales multas a las que podría enfrentarse BBVA por lo temprano de la investigación y la compleja naturaleza de este tipo de riesgos.
No obstante, indica que el banco afronta esta situación desde una posición de solvencia en la parte alta de la evaluación que hace Moody's, (del 3,14% frente al 2,15% de media de sus comparables europeos). A 30 de junio, el ratio de capital 'common equity Tier 1 en una base 'fully loaded' del banco era del 11,52%, por encima del requisito del 9,26%.
La firma, indica que antes de la decisión adoptada por el juez Manuel García-Castellón, ocho ejecutivos del banco, incluyendo su consejero delegado entre 2009 y 2015, Ángel Cano, y cuatro empleados en la actualidad, fueron imputados en julio en relación con este caso.
Moody's recuerda que el caso, que se remonta a hace 15 años, corre en paralelo a una investigación 'forensic' encargada por el banco hace seis meses a PwC, Uría Menéndez y Garriges.