Hay pocos empresarios y banqueros que no se muerdan la lengua a la hora de opinar sobre la situación en Cataluña. Uno de ellos es Josep Oliu, presidente de Banco Sabadell, quien ha señalado en un evento previo a la junta del banco en Alicante que "el empantanamiento" de la política en Cataluña "tiene efectos negativos, pero un potencial limitado".
Para Oliu, este efecto es difícil de medir, pero se nota, por ejemplo, en una "menor inversión extranjera" y limitaciones en el "turismo de calidad". "Son cosas que se notan al cabo de un tiempo, son lucros cesantes", añade.
"Los riesgos inquietan, pero no hoy más o menos. Espero que en algún momento haya un gobierno de la Generalitat, más pronto que tarde", expone Oliu. "Nos gustaría que hubiera una Generalitat, un presidente, un orden constitucional. Lo deseamos todos los empresarios. Es absolutamente necesario", añade.