La ‘Operación Canalejas’ sigue sin tener fecha para ir al pleno del Ayuntamiento de Madrid para su aprobación. Los servicios jurídicos de la corporación, junto al despacho legal Ramón y Cajal contratado para que asesore sobre dicho proyecto inmobiliario han aconsejado revisar con cuidado las alegaciones.
Según fuentes cercanas a la operación, las objeciones presentadas por el Colegio de arquitectos y el arquitecto Gastón de Iriarte han planteado con meridiana claridad los defectos del proyecto en lo relativo a las modificaciones estructurales de los inmuebles, considerados hasta la fecha Bien de Interés Cultural (BIC). Son monumentos intocables prácticamente y en cuestión de semanas se han aprobado modificaciones sobre su fachada y segregación de interiores. Por no hablar de cuestiones como la financiación del proyecto.
Este proyecto supone la conversión de los emblemáticos inmuebles de Santander en la plaza Canalejas y calle de Alcalá de Madrid, sedes históricas del Banco Hispano Americano y de Banesto, en centro comercial y hotel de mega lujo, de la cadena Four Seasons. Santander ha vendido los inmuebles a OHL, que garantiza la consecución del proyecto.
La reconversión de la zona ha tenido mucha contestación, política y social. Los partidos de la oposición han presentado duras alegaciones, mientras que algunas plataformas como change.org lleva recogidas 34.000 firmas en contra.