El Pacto de Toledo empieza a dar pasos en firme. Avanza despacio y saltándose los puntos más espinosos del debate, pero avanza. Fuentes próximas a la negociación aseguran a Vozpópuli que todos parecen estar de acuerdo en la fijación de un suelo en el Fondo de Reserva para evitar que los futuros gobiernos lo agoten.
El Fondo de Reserva se creó en el año 2000 para hacer frente a los desequilibrios coyunturales entre ingresos y gastos de la Seguridad Social. Se nutrió durante años de los excedentes obtenidos durante el periodo de bonanza económica y con algunas aportaciones hechas en los primeros años de la crisis (2008 y 2010). En total, del año 2000 al año 2015 se aportaron 52.113 millones de euros.
Los problemas empezaron en 2012, cuando el Ejecutivo tuvo que empezar a recurrir al Fondo para hacer frente a las pagas extra de los pensionistas. Desde entonoces, ha ido sacando dinero año a año hasta que la 'hucha' se quedó rondando los 15.000 millones al cierre del año pasado. Hoy la cantidad ya está por debajo de los 12.000 millones y es probable que acabe el año por debajo de los 10.000.
Las retiradas del Fondo de Reserva se llevan muchos titulares y generan desconfianza entre los ciudadanos, motivo por el que el Pacto de Toledo se plantea fijar un suelo para evitar que cualquier gobierno venidero vacíe la hucha. Sería una forma de generar confianza en el sistema y enviar un mensaje de tranquilidad, explican las fuentes consultadas.
El límite del 3%
Lo cierto es que la Ley que regula el Fondo de reserva ya tiene un límite: solo se puede sacar el 3% del gasto total en pensiones contributivas y gastos de gestión la cantidad que se pueden retirar cada año. Pero el tremendo agujero generado en el sistema durante la crisis llevó al Gobierno a eliminar esta limitación para los años 2012, 2013 y 2014 a través de un decreto ley para garantizar las prestaciones. Y volvió a hacerlo en 2015 y 2016 a través de los Presupuestos Generales del Estado del año 2015.
Todo apuntaba a que en 2017 no se tocaría el fondo porque estaba prácticamente en los huesos tras los saqueos de 2012 (7.003 millones), 2013 (11.648 millones), 2014 (15.300 millones), 2015 (13.250 millones) y 2016 (20.136 millones). Pero el Gobierno cambió de opinión y volvió a usar los Presupuestos de 2017 para eliminar ese límite del 3%.
¿Qué va a plantear ahora el Pacto de Toledo? Baraja dos posibilidades: elevar esa limitación al 5% y fijar un suelo para que ningún Gobierno pueda agotar la 'hucha'. Las negociaciones siguen y tienen que concretar la recomendación que se hará al Gobierno, pero parece que todos los partidos están de acuerdo en hacer una propuesta de este tipo.
Los partidos han aparcado las diferencias sobre la revalorización de las pensiones y han decidido seguir avanzando
El Pacto de Toledo se puso a trabajar a finales del año 2016 en la actualización de las recomendaciones para la futura reforma del sistema de pensiones. Las negociaciones se pararon a mediados de marzo por la crisis que se generó en el Partido Socialista y no se retomaron hasta mediados septiembre. Pero lo cierto es que hasta hace bien poco, habían conseguido avanzar con rapidez.
Los parlamentarios han decido apartar temporalmente los puntos más conflictos, como la revalorización de las pensiones o la separación de fuentes, y avanzar con paso firme allí donde hay puntos de encuentro, como ocurre con el Fondo de Reserva, un instrumento que todos quieren salvar porque son conscientes de la que tranquilidad que genera en el conjunto de los españoles.