Un total de 401.328 nuevos parados y 743.628 trabajadores en ERTE. Es el saldo del golpe al empleo durante el último año en España, si se comparan los datos oficiales del Ministerio de Trabajo a cierre de marzo de 2021 con los registrados justo un año antes, en pleno confinamiento tras el estallido de la pandemia. Sin embargo, la factura de la covid en el empleo es muy dispar si se compara por comunidades autónomas.
Extremadura ha sido la única región, junto a la ciudad autónoma de Melilla, capaz de bajar la cifra de parados inscritos en el SEPE. El número de parados registrados en la comunidad gobernada por Guillermo Fernández Vara ha descendido apenas un 0,25% en comparación con marzo de 2020 tras sacar de la cola del desempleo a 283 trabajadores.
Por el contrario, el empleo las comunidades autónomas más dependientes del turismo y la hostelería han vivido una auténtica hemorragia en el último año. Las más castigadas son Baleares (con un aumento del 32,2% y 20.219 nuevos parados inscritos en el SEPE), Canarias (53.016 parados más que hace un año y un incremento interanual del 23,3%), Madrid (77.870 nuevos parados, un 21,4% más que en marzo de 2020) y Cataluña, donde las restricciones a la hostelería y el comercio han contribuido en gran parte a que 88.853 personas hayan pasado a engrosar las listas del paro, siendo la comunidad con más nuevos parados registrados en términos absolutos (un aumento interanual del 21,3%).
El 'milagro' del empleo en Extremadura
En contra de lo que pudiera pensarse, el tirón del sector agrícola, el menos afectado por las restricciones impuestas para contener el coronavirus, no explica por qué Extremadura es la única región que no ha visto aumentar el paro registrado en el primer año de pandemia. Donde ha conseguido reducir el número de parados inscritos es en el sector de la industria, actividad en la que había 6.808 desempleados inscritos en el SEPE en marzo de 2020, frente a los 6.493 registrados a cierre de marzo de este año.
Extremadura confirma así la tendencia que ya marcaba la última Encuesta de Población Activa publicada por el INE. Cerró el cuarto trimestre de 2020 como la autonomía donde más bajó la tasa de paro con respecto al año anterior, un descenso del -2,16% interanual. No obstante, a pesar de ser la única región donde ha bajado el desempleo, a cierre del año pasado seguía registrando una tasa de paro del 21,3%, muy superior al 16,2% de la media nacional.
Solo la ciudad autónoma de Melilla ha sido capaz de bajar el paro más que Extremadura entre marzo de 2020 y marzo de 2021. Con una población activa de apenas 39.000 personas y un fuerte peso del sector público y el funcionariado en su economía, en Melilla hay actualmente 686 parados inscritos menos que hace un año, un descenso del 7,46%.
En el resto de comunidades autónomas ha subido el paro registrado durante el último año. De ellas, donde menos lo ha hecho es en el País Vasco. La región con la menor tasa de paro de España (un 10%, según la última EPA) ha sumado en el último año 1.808 nuevos parados, un 1,4% más que en marzo de 2020.
La hemorragia del paro en Baleares y Canarias
En términos absolutos Cataluña y Madrid son las comunidades donde más ha crecido el paro registrado en el último año, pero la región más afectada en términos relativos desde el estallido de la pandemia es Baleares.
La comunidad gobernada por Francina Armengol ha visto crecer un 32,2% el número de parados registrados en el SEPE, 20.219 desempleados más a los que se suman 33.785 trabajadores más que siguen acogidos a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), pero que no constan como parados por seguir manteniendo una vinculación contractual con sus empresas.
Baleares y Canarias, la segunda región más afectada en términos porcentuales por el incremento del paro, concentran el 16% de las 743.628 personas que siguen en ERTE en toda España un año después de decretarse el primer estado de alarma.
En términos absolutos, Canarias es la tercera región donde más ha aumentado el desempleo, con 53.016 nuevos inscritos en el paro. La mayoría pertenecen al sector servicios, donde en marzo de 2020 había 174.836 canarios registrados en el paro, frente a los 215.583 actuales.
Lo mismo sucede en Baleares, donde el número de parados registrados en el sector servicios hace un año era de 50.731 frente a los 64.460 actuales. También en Cataluña el mayor bocado al desempleo se lo lleva el sector servicios con 371.242 parados registrados frente a los 306.358 de marzo de 2020. En Madrid, este sector de la actividad es en el que están inscritos actualmente 349.976 parados frente a los 287.492 del mismo mes del año anterior.