La reforma de sistema público de pensiones mantiene en vilo a los casi nueve millones de pensionistas existentes en nuestro país en octubre pasado, a todos aquellos que están más próximas a la edad reglamentaria de hacerlo y a los que aún les faltan muchos años para alcanzar el retiro laboral.
La creencia extendida de que la Unión Europea ha exigido a España una reducción de la cuantía de las pensiones, así como menos generosidad con las denominadas “no contributivas”, y de que la ampliación del periodo de cálculo de las pensiones a toda la vida laboral y el aumento del número de años cotizados para jubilarse en las mejores condiciones económicas posibles acabarán reduciendo el importe final a percibir puede que estén distorsionando la realidad del sistema público.
En España hay 8.958.584 pensionistas, que reciben mensualmente 9.881.206 pensiones de jubilación (6.190.182), viudedad (2.354.994), incapacidad permanente… porque hay 1.023.670 personas que perciben al mismo tiempo varias pensiones. Según los últimos datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social correspondientes al mes de octubre, el 48,58% de los pensionistas (más de 4,35 millones) cobra una paga igual o por debajo del actual salario mínimo interprofesional, 965 euros brutos mensuales, tras la subida llevada a cabo por el Gobierno que entró en vigor el mes de septiembre pasado.
El importe medio de una pensión contributiva (incluidos todos los conceptos por los que se puede percibir) era en octubre de 1.037,48 euros mensuales, y el de una pensión de jubilación, de 1.193,81 euros, en ambos casos, brutos, por catorce pagas.
A lo largo de los últimos años, el importe medio de una pensión contributiva ha pasado de 927 euros mensuales, a los actuales 1.037 euros, lo que supone un incremento del 12%. En el caso de las pensiones de jubilación, se ha subido de 1.071 euros mensuales en el año 2017, a 1.194 euros, un 11,46% más.
En los últimos años, el importe medio de una pensión contributiva ha pasado de 927 a 1.037 euros mensuales, con un incremento del 12%. En el caso de la jubilación, se ha subido de 1.071 a 1.194 euros, un 11,46% más
Si se hubiera aplicado la revalorización de las pensiones de acuerdo con el Índice de Precios de Consumo, la media de las pensiones debería haberse situado en octubre de este año en 998 euros mensuales, y la de las pensiones de jubilación, en 1.153 euros, sobre la base de un incremento del IPC en el periodo analizado del 7,7%. Razones políticas han redistribuido los argumentos matemáticos en función de los intereses sociales que estaban comprometidos en los programas electorales de los distintos partidos que han sustentando los gobiernos de Mariano Rajoy, primero, y Pedro Sánchez, después.
El hecho es que 718.771 pensionistas, el 8,02% del total, ingresan en sus bolsillos menos de 500 euros todos los meses, y algo más de 2,9 millones, lo que equivale a hablar de casi un tercio del total, perciben como máximo 750 euros. La mitad de los perceptores recibe una pensión igual o inferior a los 1.000 euros mensuales y un 70,10% (6,28 millones), más de las dos terceras partes del total, cobra menos de 1.500 euros brutos.
El importe de la pensión máxima fijado para el presente año es de 2.707 euros brutos mensuales. Según los datos de la Seguridad Social, únicamente 440.357 personas percibían esa pensión en España en octubre pasado, y solo 700.169, más de 2.500 euros.
El 8,02% del total ingresa en sus bolsillos menos de 500 euros todos los meses, y algo más de 2,9 millones, casi un tercio del total, perciben como máximo 750 euros
Puede que la razón estribe en que las pensiones máximas han estado topadas durante muchos años, tanto en la cotización como en la percepción, fuera cual fuera la retribución del trabajador. Daba igual ganar 6.000 euros que 9.000 euros mensuales brutos, porque, al final se cotizaba, tanto la empresa como el trabajador en la proporción correspondiente, por un máximo de 4.000 euros.
El actual ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha anunciado hace unos días que las pensiones máximas subirán en los próximos años en la misma proporción que lo hagan las cotizaciones sociales. Lo hizo en el mismo instante en que se alcanzó un acuerdo, solo con los sindicatos, para subir en un 0,6% (un 0,5% a los empresarios y el 0,1% a los trabajadores) las cotizaciones sociales para llenar la “hucha de las pensiones” que la crisis de 2008 ha vaciado.
Según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral que elabora el Instituto Nacional de Estadística, el coste salarial por trabajador y mes se situó en el segundo trimestre de este año en 2.064 euros de media, con un incremento del 14,4% en tasa interanual. Si se excluye el factor variable de los salarios (pagos extraordinarios y atrasados), el coste salarial ordinario ha variado un 15,9% en apenas un año.