La percepción sobre el desempleo se sitúa en niveles prepandemia y el 84% de los españoles ocupados cree que no perderá su empleo en los próximos meses, según la tercera edición de 2021 del 'Informe Perspectivas del Consumidor' de Kantar, que destaca que se trata del mejor dato de seguridad respecto del propio empleo desde que se inició el índice en 2010, al tiempo que revela además que crece la confianza en la economía del país, muy débil desde 2008.
"Los efectos de la quinta ola apenas se han dejado notar, y aunque la idea de que los ingresos se mantendrán en los próximos meses se sitúa en niveles previos a la covid-19, sí se ha incrementado la incertidumbre. Un 25% de los encuestados no sabe cómo evolucionarán y un 8% piensa que descenderán", señala Kantar.
El análisis pone de manifiesto que la recuperación anímica de los consumidores ha sido rápida pero desequilibrada y entra en este momento en una situación de estancamiento. Esto es debido principalmente, según Kantar, a una economía mundial "al ralentí" y al descenso de los ingresos de gran parte de los consumidores, paliado en parte gracias a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTEs).
El Índice de Comportamiento es resultado de la valoración de la situación económica propia y del país, la valoración del momento de consumo y las perspectivas económicas a seis meses. En el tercer periodo de este año, según Kantar, hay una leve inflexión respecto al segundo trimestre, y baja un punto situándose en el -5,5, aunque no hay cambios significativos en otros indicadores superándose así el temido efecto de la quinta ola.
Asimismo, la valoración de la situación económica del hogar sigue siendo el único indicador en positivo dentro del índice, un 45%, aunque experimenta una bajada de seis puntos. La previsión de la economía doméstica, que se encontraba a las puertas de abandonar el negativo en el trimestre anterior, ha descendido seis puntos situándose en el -7%.
La actitud de los españoles ante el consumo indica también un retorno a la normalidad, aunque con un leve descenso.
Por su parte, la situación del país, tradicionalmente el indicador peor valorado, mejora tres puntos este trimestre y se sitúa en el -49%.
La intención de consumo retrocede
Por otro lado, según Kantar, la actitud de los españoles ante el consumo indica también un retorno a la normalidad, aunque con un leve descenso de los que creen que se puede mantener el consumo, un 67%, y un leve incremento de los que piensan que se debe reducir, un 25%.
La euforia de la apertura de las actividades relacionadas con el ocio que se experimentó el trimestre pasado ha dejado paso a la estabilización.
En general, la valoración del momento para comprar productos y servicios ha bajado cuatro puntos respecto al trimestre anterior y, excepto en el caso del ocio, el hogar, los pequeños electrodomésticos y la ropa que aumentan ligeramente, todos los productos empeoran su valoración.
La euforia de la apertura de las actividades relacionadas con el ocio que se experimentó el trimestre pasado ha dejado paso a la estabilización. Salir al cine o a cenar se mantiene prácticamente igual, pero cae casi seis puntos la intención de viajar los fines de semana y cuatro puntos hacer largas vacaciones o un crucero.