Sebastián Albella, que hoy toma posesión de su cargo como presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, ha estado asesorando a Tecnocom en la venta de la compañía a Indra hasta hace aproximadamente tres semanas. Se trata de un caso más de conflicto de interés que obligará a Albella a abstenerse en las decisiones del organismo sobre la operación.
La venta de Tecnocom a Indra se viene gestando desde hace seis meses, durante los cuales Sebastián Albella, como primer ejecutivo de Linklaters en España, ha asesorado a la compañía presidida por Lalo Azcona, mientras que el despacho Uría ha sido el asesor legal del grupo presidido por Fernando Abril-Martorell.
Indra lanzará una opa sobre el 100% de Tecnocom en una operación valorada en 305 millones de euros. Las compañías informaron ayer martes a la CNMV que accionistas con el 52,7% del capital de Tecnocom han firmado un acuerdo irrevocable de venta de sus títulos a Indra. El precio de la oferta es de 4,25 euros por acción, 2,55 euros en efectivo y 0,1727 acciones de Indra por cada acción de Tecnocom, un 60% en metálico y un 40% en acciones.
El nuevo presidente de la CNMV comunicó a los principales accionistas de Tecnocom hace a penas un mes que no podría seguir como asesor legal en la venta dado que el Gobierno iba a proponerle como presidente del organismo regulador del mercado español, y que otro destacado abogado de Linklaters se haría cargo de la labor, de acuerdo a fuentes conocedoras de la operación.
Indra presentará ante la CNMV la solicitud de autorización relativa a la oferta, junto con el folleto y los demás documentos que se deben aportar, el próximo 29 de diciembre como muy tarde. La CNMV tendrá que someter a su criterio si el precio ofrecido por Indra es "equitativo", una de las funciones que cumple el regulador del mercado en caso de ofertas como esta con el fin de velar por los intereses de los accionistas minoritarios.
El Consejo de Ministros celebrado el 18 de noviembre pasado propuso a Sebastián Albella como nuevo presidente de la CNMV. El abogado trabajaba en Linklaters desde el año 2005 y era miembro del comité mundial del bufete. Entre los años 1988 y 1991 fue jefe de los servicios jurídicos de la CNMV.
El despacho Linklaters, como ha informado este diario, fue asesor de Siemens en la compra de Gamesa, participando Albella directamente en las funciones de asesoramiento desde la oficina de Madrid del bufete internacional. La operación está pendiente de que la CNMV apruebe eximir al grupo alemán de lanzar una opa sobre el 100% de la compañía española. Siemens defiende que se trata de una fusión, una operación con un objetivo industrial, por lo que no tendría que estar obligada a presentar una oferta por la totalidad del capital.
Linklaters también ha sido asesor de Abengoa en emisiones de bonos por valor de 2.054 millones de euros. El bufete ha participado además en la elaboración del plan de reestructuración que ha permitido a la compañía energética evitar el concurso de acreedores y la previsible liquidación.
Sebastián Albella (Castellón, 1958) también tendrá que abstenerse en las decisiones que pudiera adoptar la CNMV sobre operaciones realizadas por Alantra (antigua N+1), al ser un hermano suyo socio del banco de inversión presidido por Santiago Eguidazu.
El 23 de noviembre Albella acudió al Congreso para defender su nombramiento, ante la Comisión de Economía y Competitividad, que avaló la no existencia de conflicto de intereses con el respaldo del PP, Ciudadanos, PNV, y Coalición Canaria. PSOE, Podemos, y la antigua Convergència se opusieron al nombramiento poniendo en duda que no pudieran existir casos de conflicto de interés.
