Ana Botín fue elegida para presidir el Banco Santander el mismo día que murió su padre, Emilio Botín. La banquera tomó el poder con el deber de reforzar el capital de la entidad y con la intención de conseguir un consejo de administración más independiente. Para ese entonces 9 de septiembre de 2014, la entidad era asesorada por una cúpula llena de personas afines a su padre. A día de hoy, la situación es muy distinta.
Lejos quedan ya nombres como los de Javier Marín, Fernando de Asúa o Rodrigo Rato. No tanto el de Juan Miguel Villar Mir, el vocal más longevo, que saldrá finalmente del consejo tras "presentar su renuncia una vez vencido su mandato".
El empresario se va del banco 'rojo' con varias imputaciones encima de la mesa. En casos como Púnica, Lezo y los Papeles de Bárcenas. Su salida no es una sorpresa, de hecho ya se sabía, pero es la última marcha de la 'vieja guardia'.
Su lugar lo ocupará el futuro consejero delegado, el italiano Andrea Orcel. El nuevo número dos del banco tiene una dilatada carrera en grandes entidades como UBS o Bank Of America y Merrill Lynch.
Álvarez, a la vicepresidencia
Un movimiento inesperado ha sido el de José Antonio Álvarez. Llegó a la dirección del banco junto con Botín y en sustitución de Javier Marín, puesto en el cargo por Emilio Botín año y medio antes de su muerte.
En la renovada entidad, Álvarez pasará a ser presidente ejecutivo de Santander España y vicepresidente de Banco Santander. Este último puesto lo compartirá con Bruce Carnegie-Brown. Guillermo de la Dehesa Romero, otro directivo anterior a 2014, dejará de ser vicepresidente, pero mantendrá su cargo como consejero.
Estos son los últimos cambios que ha hecho la banquera, pero no los únicos, puesto que en estos cuatro años, Ana Botín se ha sabido rodear de gente de su confianza. Nueve vocales ya han entrado en la cúpula desde su nombramiento como presidenta del banco: José Antonio Álvarez, Bruce Carnegei, Homaira Akbari, Sol Daurella, Carlos Fernández González, Belén Romera, Ramiro Mato, Jaime Pérez Reverte y el futuro consejero delegado, el italiano Andrea Orcel, que también ocupará el puesto que deja Villar Mir en la mesa.
Los primeros movimientos
Para finales de 2014, Ana Botín ya había aceptado la renuncia de varios hombres de Emilio Botín, como Fernando de Asúa y Abel Matutes, ex ministro con el PP con José María Aznar. Paralelamente a estas salidas, José Antonio Álvarez se erguía como el nuevo consejero delegado del Santander, en sustitución de Javier Marín, que duró en el cargo no más de año y medio.
Pero estos idas y venidas no se pueden comparar a los ríos de tinta que corrieron con la salida de Rodrigo Rato. Fue nombrado asesor en 2008 y tras su escándalo con las tarjetas 'black', el Santander se vio obligado a disolver el consejo asesor internacional, del que formaba parte y que resucitaría un año y medio más tarde, con figuras internacionales de renombre como Larry Summer, ex secretario del Tesoro de Estados Unidos.
Feminismo y frente internacional
La cuota femenina siempre ha sido una obsesión para la banquera, casi al mismo nivel que la de incorporar figuras internacionales.
Entre sus fichajes se encuentran la presidenta de la embotelladora de Coca Cola, Sol Daurella, o la doctora en Física Homaira Akbari. También figuras pseudopolíticas como Belén Romana, expresidenta de Sareb y antigua directora del Tesoro en la etapa de Luis de Guindos.
Entre sus incorporaciones internacionales se encuentran Bruce Carnei-Brown, presidente no ejecutivo de Moneysupermarket.com, el ingeniero mexicano Carlos Fernández o Ramiro Mato, antiguo presidente de BNP Paribas para España y Portugal.
