Repsol ha cerrado un gran año. El buen comportamiento en 2022 del refino, su división que convierte el petróleo en derivados como la gasolina o lubricantes, y la venta de participaciones en divisiones como renovables o el negocio de producción petrolera han engordado su cuenta de resultados en un año de gran inestabilidad. El próximo jueves desvelará los detalles. Los analistas y firmas que siguen el día a día a Repsol hablan de que serán “cifras récord”, duplicando registros como su beneficio antes de impuestos hasta los 10.500 millones de euros.
Unos resultados que avivarán los ataques que ha mantenido el Gobierno en la puesta en marcha de su ‘impuestazo’ por los “beneficios extraordinarios” que han logrado por el alza de los precios. “La crisis no puede ser una excusa para ganar más. Congelar hipotecas, moderar beneficios”, denunciaba la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, tras los resultados de BBVA. Una declaración que llegaba después de la expresión “capitalista despiadado” de la ministra Ione Belarra para referirse al presidente de Mercadona, Juan Roig.
El sector espera que, de aquí a marzo, estos ataques 'anti Ibex' se concentren ahora en las grandes energéticas del Ibex que rinden cuentas al mercado. Naturgy arranca esta ronda el miércoles, donde se esperan también unas grandes cifras por los elevados precios del gas en el pasado ejercicio, y el jueves será turno de Repsol.
Josu Jon Imaz saldrá a la palestra para defender y explicar estos resultados. El consejero delegado de Repsol partirá de la base de que los buenos datos de 2022 todavía no compensan los 3.289 millones de ‘pérdidas extraordinarias’ que tuvo la compañía. También agradecerá las buenas palabras del Gobierno, y en concreto Teresa Ribera, en los diferentes documentos públicos en los que han ensalzado su capacidad de asegurar el suministro de derivados del petróleo en España en la crisis de Ucrania.
La banca de inversión espera el récord de Repsol
Sin el ruido político, el foco está en la reacción del mercado a estos resultados. Goldman Sachs recomienda a sus clientes que compren las acciones de Repsol. El banco de inversión estadounidense espera que la petrolera presente un beneficio antes de intereses e impuestos (Ebit) en 2022 de 10.575 millones de euros, frente a los 4.372 millones que registró por esta partida en 2021.
Goldman Sachs considera que el precio de las acciones de Repsol deben acercarse a los 21 euros, que resulta un 37% más alto de los 15,32 euros con los que ha cerrado la compañía este viernes. Los analistas de Bank of America van en esta línea y han decidido corregir al alza su precio objetivo para la energética española, esperando un crecimiento de su cotización del 30% hasta los 19,55 euros por acción.
“Creemos que Repsol está muy bien posicionada para aprovechar el actual déficit global de diésel y las elevadas grietas en el 'destilado medio'". La compañía genera la mayor proporción de resultado bruto de explotación, en torno al 30%, a través del refino. Un registro sólo superado por la turca Tupras y la húngara MOL. Su modalidad de refino está muy orientada hacia el destilado medio, donde nuestro equipo de materias primas espera un aumento significativo”, explican los analistas de Bank Of America.
70.486 millones de ingresos
El analista de Bestinver Securities, Álvaro Navarro, espera que Repsol alcance en estas cuentas unos ingresos de 70.486 millones de euros, frente a los 49.480 de 2021, y un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 13.326 millones de euros, que superan con creces los 7.071 millones del año anterior.
Unas cifras en 2022 que, aunque más moderadas, el analista espera que se mantengan en este año. “Repsol está orientado al diésel, que representa cerca 55 % de su producción de destilados medios, por lo que esperamos que aproveche las inestabilidades del mercado. Las próximas prohibiciones a las importaciones rusas pueden causar más interrupciones en Europa, que tiene una escasez estructural de diésel”, apuntan desde Bestinver.
Las buenas cifras que esperan los expertos que presente Repsol va en línea con lo que están viviendo sus rivales europeos. La francesa TotalEnergies anunció un beneficio neto de 19.147 millones de euros en 2022, un 28% más que en 2021. La petrolera británica BP presentó registros récord de sus 114 años, pese a ser una de las compañías más afectadas por su exposición al mercado ruso. Unas cifras que también espera el sector en España para Cepsa y que también dará más ‘gasolina’ a las exigencias del Gobierno a las energéticas.
