El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este jueves que España seguirá trabajando junto con la Unión Europea para reformar un sistema de fijación de precios de la electricidad que considera "trasnochado e injusto". Sánchez realiza estas declaraciones tras el 'fiasco' que ha supuesto la puesta en marcha de la 'excepcionalidad ibérica'. El Gobierno esperaba rebajas de hasta el 30% gracias al tope al precio del gas autorizado por la UE. Pese a ello, los tres primeros días de puesta en marcha de la medida, el precio ha aumentado un 3% este miércoles. El lunes y el martes también se registraron subidas. El Ejecutivo defiende que estas serían aún mayores de no ser por la limitación de los precios del gas.
Durante su intervención en la clausura del congreso Global Mobility Call, Sánchez ha explicado que, mientras se negocia una "reforma estructural del mercado" a nivel europeo, el mecanismo que limita el precio del gas empleado en la generación eléctrica supone un "acuerdo muy importante" para España. Este mecanismo, según Sánchez, aumentará la protección durante los próximos 12 meses de empresas, industrias y familias ante posibles subidas en el futuro derivadas de una intensificación del conflicto bélico en Ucrania.
En esta línea, ha vuelto a explicar que el Gobierno aprobará próximamente la prórroga del plan nacional de respuesta ante las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania, que se extenderá a otros sectores afectados. "En breve vamos a aprobar su prórroga en el Consejo de Ministros para seguir protegiendo a las empresas y a las familias en este contexto de tan extraordinaria incertidumbre", ha dicho el presidente del Gobierno.
Transición a la sostenibilidad
En cuanto a la movilidad sostenible, ha recordado que el Gobierno movilizará 13.000 millones de euros de los fondos europeos para transicionar hacia un modelo más sostenible, que permitirá descarbonizar las ciudades, mejorar la calidad del aire y digitalizar las infraestructuras. Además, ha advertido de que tanto la pandemia como la invasión rusa de Ucrania no pueden servir como excusas para "aplazar transformaciones que necesita España para seguir avanzando y ganar su futuro".
Sánchez ha explicado que lograr una movilidad con cero emisiones es el objetivo principal de la hoja de ruta europea, en un proceso de transformación hacia una nueva movilidad que no solo afecta al sector del transporte, sino a todos lo poderes públicos. Para ello, el objetivo del Ejecutivo pasa por contar con 250.000 vehículos eléctricos y 100.000 puntos de recarga en 2023, y alcanzar los 5 millones de coches en 2030.
En este sentido, ha destacado la acogida que han tenido los planes de ayuda como el Moves III, en el cual se han agotado los 400 millones asignados inicialmente para instalar puntos de recarga, lo que ha llevado al Ejecutivo a destinar una partida adicional de 226 millones.