Pedro Sánchez cambió su agenda el domingo a última hora de la tarde. El presidente del Gobierno decidió acudir el lunes Toledo para bendecir el acuerdo que presentaban la estadounidense Cummins y la energética Iberdrola, presidida por Ignacio Sánchez Galán.
Un movimiento de Sánchez con el que sorprendía a los propios organizadores, ya que esta presentación iba a ser liderada por Teresa Ribera y Reyes Maroto. Pero las ministras dieron un paso al lado, no realizaron ninguna declaración en el viaje y, según explican fuentes internas, asumieron que habían sido contraprogramadas por el presidente.
El acto era idóneo para Ribera y Maroto. El anuncio de Cummins llega con una primera inversión de 50 millones de euros para fabricar electrolizadores en Guadalajara, que Iberdrola utilizará para producir hidrógeno verde. Para la ministra de Transición Energética y el Reto Demográfico habría sido una nueva oportunidad de sacar pecho en los avances de España en la descarbonización de la economía y la creación de actividad en una región afectada por la despoblación.
La ministra de Industria y Turismo habría podido celebrar la creación del primer centro de producción de esta industria, en una época donde el turismo sufre más que nunca. Pero Pedro Sánchez fue el encargado de asumir todos los focos por parte del Gobierno.
“Él ha hablado por todos”, explican las mismas fuentes de Moncloa preguntadas por el silencio de ambas ministras. El presidente tomó la palabra después del presidente de Iberdrola, el presidente de Cummins y el presidente de Castilla La Mancha. Sánchez agradecía a Sánchez Galán, de presidente a presidente, la asistencia el pasado jueves en la presentación de ‘España 2050’. Un evento donde la ausencia de muchas caras conocidas del ámbito empresarial sorprendió a algunos representantes del Gobierno.
"No molestar a nadie"
“Tras la decisión del presidente, la ministras no han cancelado su asistencia por no molestar a nadie”, explican fuentes del Ejecutivo. Uno de los encuentros esperados era el de Teresa Ribera con Emiliano García-Page.
Como contaba Vozpópuli, el presidente regional se había unido con los líderes de otras regiones de la llamada ‘España vaciada’ para reclamar más atención de la ministra del Reto Demográfico. Pero ese diálogo no se ha producido, por lo menos, en el salón donde ha tenido lugar este acto en Toledo.
García-Page aprovechó su turno de palabra para agradecerle a “Nacho”, forma en la que se refirió en varias ocasiones a Ignacio Sánchez Galán, por confiar en “la Tierra del Quijote”. Sánchez Galán habló del cariño que tiene a la región, principalmente, por su “amigo” Pepe Bono. Y Pedro Sánchez quiso agradecer la apuesta por España al presidente de Cummins con un ‘Bienvenido, Mr. Linebarger’.
