El banco Santander se volverá a reunir con los sindicatos el próximos 14 de mayo para seguir con las negociaciones previas que se realizan antes de formar a la mesa de trabajo en la que se tratará las condiciones del próximo expediente de regulación de empleo (ERE) de la entidad.
El banco tiene hasta el próximo 23 de mayo para constituir dicha mesa, según los estatutos. Por lo que esa fecha es el límite para explicar a los sindicatos las condiciones iniciales con las que empezar a negociar. Según cálculos internos a los que ha podido acceder Vozpópuli la cifra de despidos podría ascender hasta los 3.000 empleados.
Fuentes financiera consultadas alertan de que este nuevo ajuste podría llegar esta vez hasta las personas que trabajan en la gestora de fondos de la entidad.
En la primera reunión, el banco explicó los motivos por los que es necesario el reajuste de la plantilla. Fue una jornada muy tranquila, ya que aún no se ha hablado de cierre de oficina ni de número de empleados. La próxima se espera que siga en el mismo tono, a falta del informe técnico.
Las cifras correspondientes al número de trabajadores y oficinas que se verán afectados aún no son oficiales, mientras que el Santander ha indicado que el procedimiento se articulará con arreglo a lo recogido en el articulo 12 del Convenio Colectivo de Banca, según recoge Europa Press.
Este convenio recoge los criterios y procedimientos en procesos de reordenación a través de medidas de flexibilidad interna y acuerdos negociados con los sindicatos.
La integración tecnológica
En abril, el banco tiene integró todo el sistema catalán y canario. En mayo, las comunidades que se unificarán son Aragón, Navarra, Valencia y Baleares.
Ya en verano se comenzará con una primera etapa en Madrid, y todo Andalucía en junio. Para terminar, si todo sale bien, en julio se finalizará con Castilla-La Mancha y el sobrante de la Comunidad de Madrid.