El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) abonó 2.472,1 millones de euros en prestaciones por desempleo en diciembre de 2020, de los que 768 millones, un 31%, fueron percibidos por los trabajadores protegidos por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).
Según los datos proporcionados este martes por el Ministerio de Trabajo, el gasto en prestaciones se ha incrementado un 43,2% respecto al mismo mes del año anterior.
El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ha explicado que este incremento se ha debido a la mejora sobre la cuantía de la prestación aplicada por el Gobierno al mantenerla en el 70% de la base reguladora, ya que hasta la pandemia se reducía al 50% a partir de los seis meses.
También ha influido el perfil de los trabajadores beneficiados por los ERTE derivados de la covid-19, ha dicho Pérez Rey, ya que "sus bases reguladoras son algo más altas de lo que era frecuente".
El gasto medio mensual por beneficiario, sin incluir el subsidio agrario de Andalucía y Extremadura, en el mes de diciembre de 2020 ha sido de 1.100,8 euros
En diciembre 2.299.575 trabajadores percibían una prestación por desempleo del SEPE, de los que 1,1 millones recibían la contributiva, 957.817 el subsidio por desempleo, 135.965 la renta activa de inserción, 96.032 el subsidio para eventuales agrarios y 4 el extinto programa de activación por desempleo.
Gasto medio mensual por beneficiario
El gasto medio mensual por beneficiario, sin incluir el subsidio agrario de Andalucía y Extremadura, en el mes de diciembre de 2020 ha sido de 1.100,8 euros, lo que supone un aumento sobre el mismo mes del año anterior de 199,4 euros (22,1%).
Con estos datos, el sistema de protección por desempleo ha amparado al 63,3% de las personas desempleadas durante diciembre, dos puntos por debajo de la tasa marcada en el mismo mes de 2019 (65,35%).
