Sindicatos y empresarios están totalmente inmersos en la negociación de la subida salarial de 2017, pero las posturas se mantienen distanciadas, incluso entre las dos organizaciones que representan a los trabajadores. La próxima semana mantendrán un nuevo encuentro con el que “empiezan de verdad las negociaciones”, según dicen algunas fuentes consultadas, aunque parece difícil que se pueda pactar ya la cifra concreta se utilizará de referencia el año que viene.
Y es que, de momento, cada uno quiere una cosa. UGT busca una subida salarial en condiciones para compensar los esfuerzos que han hecho los trabajadores durante la crisis. Fuentes oficiales del sindicato aseguran que de momento no quieren hablar de cifras, pero lo cierto es que llegaron a inclinarse por una subida general del 4%, ahora que la economía está creciendo por encima del 3%. Algunos acusan a la nueva cúpula de UGT de estar usando la negociación con cifras imposibles para que el sindicato recupere fuerza.
CC.OO. no quiere ir tan lejos. De hecho, el sindicato de Ignacio Fernández Toxo prefiere que en el nuevo acuerdo no figure una “cifra mágica”, para no pasarse ni quedarse corto. Fuentes del sindicato explican que hay empresas que podrán incluso ir más allá del 4% que defiende UGT y otras que no podrán superar la cifra de este año. Hay que ver caso por caso. De hecho, desde CC.OO. aseguran que fue CEOE quien se empeñó en poner cifras en el último acuerdo.
La CEOE quiere continuidad y recuerda que los salarios están subiendo más cerca del 1% que del 1,5%
Y CEOE y Cepyme quieren que se dé continuidad a lo ocurrido en los años anteriores. Es decir, que la subida salarial ronde el 1%. Tal y como dicen, las últimas cifras de convenios refuerzan su posición, puesto que arrojan una subida salarial del 1,08% hasta septiembre, ligeramente por debajo del dato de agosto (1,09%). Esto demuestra que muchas empresas que siguen teniendo bases imponibles negativas a pesar de la recuperación y que hay que ser prudentes a la hora de fijar incrementos salariales.
Esta tendencia a la baja en los salarios aleja cada vez más el incremento medio de la referencia del 1,5% que se fijó en el III Acuerdo de Negociación Colectiva, lo que, para la patronal, prueba que hay que manejar con mucho cuidado las previsiones que se hacen. Aún así, CEOE, de momento, no va a plantear una cifra concreta.
En cualquier caso, el acuerdo vigente dice que los negociadores deberán tener en cuenta las circunstancias específicas de su ámbito para fijar las condiciones salariales del año que viene, de tal manera que los porcentajes de incremento se podrán modular en cada sector o empresa dentro de los límites derivados del incremento de la productividad y del empleo.
La verdadera negociación empieza la próxima semana, aunque parece difícil que salga ya una cifra el 20 de octubre
En lo que sí parecen estar de acuerdo es en que la auténtica negociación empezará en la reunión del 20 de octubre. Aunque el encuentro servirá para empezar a hablar en términos más concretos, parece difícil que finalice con un cifra sobre la mesa que guste a todas las partes. En el primer documento que elaboraron los sindicatos de manera conjunta, optaron por no fijar ninguna. Solo avisaban a los empresarios de que reclamarían subidas que redujeran las desigualdades económicas y que, al mismo tiempo, contribuyeran a consolidar el crecimiento.
Esa misma semana, los agentes sociales se reunirán con la delegación del Fondo Monetario Internacional (FMI) que estará de visita en España. El FMI es curiosamente una de las instituciones que tradicionalmente ha pedido a España que modere los salarios y puede que vuelva a aprovechar la situación para insistir en su mensaje. Con los representantes de la patronal se reúne el mismo 20 de octubre.
Primer acuerdo salarial de Pepe Álvarez
El III Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva fijaba para 2015 una subida salarial de hasta el 1% y de hasta el 1,5% para este ejercicio. Para 2017, el acuerdo decía que las organizaciones tendrían que tomar la decisión más adelante teniendo en cuenta la evolución del PIB en 2016 y el cuadro macroeconómico del año siguiente. Así que vienen meses de grandes negociaciones.
El presidente de la CEOE, Juan Rosell, el de Cepyme, Antonio Garamendi, y el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, ya negociaron el último acuerdo de negociación colectiva. En cambio, para el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, será una de sus primeras grandes batallas, después de haber sido elegido para sustituir a Cándido Méndez el pasado mes de marzo.
