La subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que el Gobierno quiere aprobar de forma inmediata provocará un aumento instantáneo de los tipos de cotización de los trabajadores autónomos, lo que en la práctica se traducirá en un aumento de entre tres y 12 euros en la cuota por cotizaciones sociales que pagan mensualmente a la Seguridad Social.
Todavía se desconoce cuánto subirá el Salario Mínimo -el Gobierno ha propuesto un incremento de 15 euros hasta los 965 euros en catorce pagas pero aún tiene que seguir el debate en el diálogo social-, pero independientemente del incremento, cualquier alza del SMI en 2021 provocará que las subidas en los tipos de cotización de los autónomos, que habían quedado suspendidas por la pandemia, vuelvan a activarse.
Así quedo decidido en el Real Decreto-ley 02/2021, de 26 de enero, en el que se estipuló que "a partir del 1 de febrero de 2021 y mientras no se lleve a cabo la subida del salario mínimo interprofesional para el año 2021 no será de aplicación lo previsto en la disposición transitoria segunda del Real Decreto-ley 28/2018, de 28 de diciembre".
Lo que decía esa disposición transitoria era precisamente que los tipos de cotización de los autónomos por contingencias profesionales subirán en el año 2021 del 1,1% al 1,3%; mientras que el tipo de cotización para cese de actividad pasaría del 0,8% al 0,9%. Si sumamos el tipo por contingencias comunes (28,3%) y el tipo por formación profesional (0,10%), el tipo de cotización total del autónomo pasará del 30,3% al 30,6%.
La cuota de autónomos subirá en función de la base
Para saber cuánto va a pagar de más cada autónomo a la Seguridad Social habrá que aplicar ese 30,6% a su base de cotización -que varía en cada caso-, y comparar con lo que aportaba con el tipo del 30,3%. Los que cotizan por la base mínima (944,4 euros al mes) -que a su vez se verá incrementada- sufrirán un incremento de la cuota de unos tres euros al mes; mientras que los que lo hacen por la máxima (4.070,10 euros al mes) pagarán 12,2 euros más.
Una subida del SMI implica un aumento de las bases mínimas de cotización de los asalariados, así que tanto trabajadores como empresarios incrementarán su contribución a la Seguridad Social. De ahí que, cuando esto suceda, automáticamente ocurrirá lo mismo con la base de los autónomos.
Lorenzo Amor, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA, la más representativa), ha lamentado que esto supone "un nuevo palo para los autónomos".
Buena noticia para las pensiones
No obstante, tanto subir el Salario Mínimo como que se incrementen los tipos de cotización de los trabajadores por cuenta propia supone un aumento de los ingresos de la Seguridad Social, necesario para que el sistema pueda acometer el creciente gasto en pensiones públicas, que se verá tensionado especialmente de aquí a 2050 por la jubilación de la generación del babyboom.
"Debemos quitarnos de la cabeza que la cotización a la Seguridad Social es un impuesto, es la manera de financiar las pensiones", defendía esta misma semana Israel Arroyo, secretario de Estado de Seguridad Social, en respuesta a una pregunta de Vozpópuli durante la rueda de prensa posterior a la publicación de los datos de empleo.