Ignacio Fernández Toxo prometió expulsar del sindicato a los seis consejeros de Comisiones Obreras (CCOO) salpicados por el escándalo de las tarjetas black. El anuncio se efectuó en octubre, una vez que el sindicato finalizó su investigación interna a raíz de conocerse que sus seis sindicalistas gastaron 776.000 euros, entre 2003 y 2012, con sus visas black. Sin embargo, Gabriel Moreno sigue siendo el hombre de CCOO, según confirman diversas fuentes a Vozpópuli, en las negociaciones que los sindicatos mantienen con Bankia para unificar las condiciones de los planes de pensiones de las siete cajas que conforman la entidad.
La situación de Moreno es, cuanto menos, paradójica. Desde la semana pasada, Moreno es uno de los 78 directivos imputados por las tarjetas black. Sin embargo, CCOO ha decidido levantarle la suspensión cautelar que se le impuso ante la investigación en curso del juez Fernando Andreu. Fuentes del sindicato explican a este medio que la comisión de control de CCOO ha decidido sobreseer el caso de Moreno al estimar que todos su gastos están justificados por ser de representación. De esta manera, Moreno está 'limpio' para el sindicato pese a su reciente imputación. Sobre este tema, estas mismas fuentes aseguran que CCOO "aún no ha recibido oficialmente el auto de imputación de Moreno. Lo conocemos a través de la prensa". A la luz de estos hechos, Moreno, que ha sido secretario general de la sección sindical de este sindicato en Bankia, durante los últimos años, es el hombre elegido por CCOO para estar presente en la mesa negociadora que aborda las modificaciones del sistema de previsión social complementaria de la plantilla de la entidad nacionalizada.
La comisión de control de CCOO ha sobreseído el caso de Moreno al entender que todos sus gastos estaban plenamente justificados, levantándole así la suspensión de militancia
Moreno ha asistido a dos de las reuniones de esta mesa negociadora. La primera, el pasado 30 de diciembre. El 15 de enero se celebró el segundo encuentro. Desde CCOO confirman la asistencia de Moreno a ambas reuniones pero puntualizan que éstas han servido para formar la mesa pero que el proceso negociador aún no está en marcha. Desde otros sindicatos y la propia entidad sí confirman, sin embargo, el inicio de las conversaciones. La presencia del imputado ha provocado las quejas de otros sindicatos que han trasladado a Bankia las dudas sobre la capacidad jurídica de Moreno para presentarse como representante de CCOO. Además, critican a este sindicato que no haya notificado si se le ha levantado o no la suspensión de militancia. El 'perdón' de CCOO se ha conocido hace apenas unos días, confirman desde el sindicato, cuando se han sabido internamente las conclusiones de la comisión de control. Ahora, el sindicato tendrá que trasladarlo a las diferentes partes de la negociación.
Mientras tanto, otros sindicatos han solicitado que Moreno deje de formar parte de la actual mesa negociadora sobre los planes de pensiones por su condición de imputado. En este sentido, CCOO aún no ha decidido si tomará una decisión que implique el cambio de otro representante por Moreno en esta negociación. Moreno, según ha comunicado al sindicato, no se presentará a la renovación de los órganos que Comisiones Obreras tiene en Bankia. Este proceso se producirá dentro de dos meses. Hasta entonces, si la central sindical no toma una decisión en sentido contrario, el imputado continuará representando a CCOO en Bankia.
Moreno fue elegido consejero en julio de 2006 como miembro de la comisión de control de Caja Madrid en representación de los trabajadores, por parte del sindicato CCOO. Actualmente, Moreno sigue perteneciendo a la plantilla de Bankia como liberado sindical por Comisiones Obreras. Precisamente, la protección que le ofrece su condición de sindicalista le imposibilita a la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri tomar cualquier tipo de medida disciplinaria por su imputación en el tema de las tarjetas black.
El que ha sido secretario general de la sección sindical de CCOO, primero en Caja Madrid y posteriormente en Bankia, gastó 20.400 euros en cuatro años con su visa opaca. La mayoría de sus cargos, según se conoció por su relación de gastos, son por almuerzos en restaurantes de categoría media y aparcamientos.
De los seis sindicalistas salpicados, sólo dos estaban en activo: Rodolfo Benito presentó su dimisión y Gabriel Moreno puso su cargo a disposición de su Federación
Situación actual de los afectados
En el momento en el que salto el escándalo de las visas opacas de Caja Madrid y Bankia, Gabriel Moreno era el único de los seis -junto a Rodolfo Benito- representantes sindicales de CCOO que aún mantenía un puesto de responsabilidad en el sindicato. Tras conocerse sus gastos, Moreno puso su cargo a disposición de su Federación.
De los seis sindicalistas salpicados por el escándalo, sólo dos estaban en activo en la organización cuando se conocieron los millonarios gastos de los consejeros de Miguel Blesa y Rodrigo Rato. De ellos, la primera dimisión fue la del responsable de la Secretaría de Estudios y presidente de la Fundación 1º de Mayo, Rodolfo Benito (142.085 euros de gasto), mientras que el secretario de la sección sindical de Bankia, Gabriel Moreno Flores (20.035 euros), puso su cargo a disposición del sindicato. De los otros cuatro, dos presentaron la baja afiliativa voluntaria sin ninguna explicación: Francisco Baquero (265.927 euros) y Antonio Rey (192.936 euros), que precisamente son los dos que incurrieron en mayores gastos.
Por su parte, Juan José Azcona (99.008 euros) solicitó la baja mientras dura el proceso de investigación judicial (al igual que Benito). El sexto consejero de CCOO implicado, Pedro Bedia (78.171 euros), presentó un informe en el que da su versión de los hechos, al igual que Moreno.