El Tesoro Público ha captado hoy 4.773 millones de euros en una subasta de deuda a largo plazo, con menores intereses en prácticamente todas las denominaciones, lo que le ha permitido cubrir ya el 51,5 % de sus objetivos anuales de emisión.
Con la puja de este jueves España ha conseguido 104.800 millones de euros en lo que va de 2017, de los que 68.400 millones forman parte del programa de financiación a medio y largo plazo, según los datos facilitados por el Ministerio de Economía.
De este modo el Tesoro avanza en sus objetivos de emisión y lo hace nuevamente a precios más bajos que en anteriores ocasiones, especialmente en la deuda a 10 años, que ha vendido al 1,56 %, en línea con la rentabilidad que exigen los inversores en el mercado secundario.
Y es que, según explica el analista de XTB Rodrigo García, aunque se está lejos de un escenario en el que predomine la normalización de tipos, parece que el "abrupto" descenso de las tasas de interés ha llegado a su fin.
"La estabilización aparece, y con ello el gasto financiero que debe asumir el Gobierno se hace previsible subasta tras subasta, lo que se traduce, para los presupuestos generales del Estado, en menor incertidumbre en esa partida", argumenta.
Por eso coincide con otros expertos en que el Tesoro, en lugar de intentar financiarse a tipos bajos, debería intentar buscar la estabilización presupuestaria que permita amortizar los montantes de deuda existentes y reducir hasta el mínimo la partida de gastos financieros.
Sea como sea, la subasta de hoy se ha salvado con éxito y el grueso de la emisión, 1.621,60 millones, se ha colocado en bonos a 5 años, con una vida residual de 3,2 años, y un interés del -0,125 %, aún más bajo que el -0,117 % anterior, después de que los inversores demandaran 2.330,97 millones de euros.
Otros 1.263,07 millones se han conseguido con una reapertura de una emisión a 15 años a la que le quedan de vida 9,2 años, con un interés del 1,374 %, frente al 1,469 % de la última subasta, gracias a que la demanda ascendió a 2.165,07 millones.
España ha aprovechado esta subasta, la última de mayo, para captar también 1.192,55 millones más en deuda a 10 años, con una rebaja superior al 8 % respecto a la puja previa, ya que el interés último ofrecido ha pasado del 1,701 % al 1,563 %.
El resto del "papel" colocado por el Tesoro Público correspondió a otras obligaciones a 15 años a las que le quedan de vida 6,8 años, con las que se hizo con 695,77 millones a un interés del 0,787 %, sólo en este caso, ligeramente superior al 0,780 % anterior, después de que los inversores solicitaran 1.537,77 millones de euros.
Según los datos de mercado consultados por Efe, la demanda total ha ascendido a 7.738,36 millones, 1,6 veces los 4.772,99 millones adjudicados, que están en la banda alta de la horquilla de entre 4.000 y 5.000 millones que el Tesoro Público se había fijado como objetivo para esta subasta.
La colocación de esta semana llega apenas dos días después de que España captara 1.605 millones en letras a tres y nueve meses, que en el último caso salieron a un interés más negativo que en pujas previas, lo que se traduce en que cobra más a los inversores.
