Los trabajadores con un contrato fijo discontinuo perciben su situación más cercana a aquellos que tienen contrato temporal que a la de los que tienen contrato indefinido. Es una de las conclusiones de la encuesta La influencia de la negociación colectiva en el bienestar laboral, la precariedad laboral, el compromiso y el rendimiento en el trabajo que ha realizado la Fundación Primero de Mayo, de CCOO, que se ha presentado este lunes en la sede del sindicato.
Otra de las conclusiones de la encuesta que se alejan de la versión del Gobierno sobre la reforma laboral es la de que la precariedad es menor entre las personas cubiertas por un convenio de empresa o provincial que por un convenio autonómico o estatal.
Se trata de una encuesta en la que se ha preguntado a 1.600 trabajadores entre el 22 y el 28 de diciembre de 2022, de la que la Fundación y CCOO hacen una lectura positiva, sobre que la mayoría de trabajadores perciben de forma favorable la negociación colectiva, en concreto sobre igualdad de género, seguridad laboral y mejora de las condiciones laborales.
Sin embargo, la encuesta muestra que el 49% de la población asalariada considera que las condiciones laborales le son impuestas y que no tiene capacidad para negociar sus condiciones laborales.
El 32,2% asegura que sufre largas jornadas, aunque no hay especificación en la pregunta sobre la duración de la jornada ni de si se trata de un margen por encima de su contrato e incumpliendo la obligación del registro horario, en vigor desde mayo de 2019, y con remuneración de horas extra.
El 22% de los trabajadores tiene miedo de sufrir represalias por parte de su empresa si se afilia a un sindicato, lo que a Unai Sordo, secretario general de CCOO, no le parece "de recibo en un Estado democrático con libertad sindical".
Sobreactuación con las vacantes
Sordo ha destacado que la Fundación pretende plantear una "alternativa académica a los informes de parte que detecta desde la patronal relativos a las vacantes o a las pensiones". Así, ha alertado contra la "sobreactuación en las vacantes", que ve más un problema de bajo salario. Ha enumerado además que quieren contrarrestar el discurso de las paguitas, frente al que ha planteado el de la necesidad de que haya buenos salarios, y el discurso antisindicalismo.
Sobre la reforma para elevar las restricciones al despido que propugnan, ha augurado que cuando haya gobierno se abrirá este "debate complejo", que cree que "no será pacífico".
