Desde hace años, en España se han producido imágenes poco habituales de los trenes que conectan los diferentes puntos del país. Trenes que comienzan a arder, trenes que se quedan parados y dejan tirados a los pasajeros en pleno viaje, trenes que no tienen aire acondicionado o el más reciente: unos trenes que no encajan en los túneles de Asturias y Cantabria. Este último escandalo dejó ceses en Renfe y Adif.
Muchos han sido las ocasiones en las que los pasajeros han tenido que viajar en trenes que no tenían unos requisitos perfectos. Y es habitual que las quejas se hayan trasladado a las redes sociales. Hasta hace poco, la diputada del PP en el Congreso y vicepresidenta provincial del partido en Cáceres, Dolores Marcos publicó un mensaje en Twitter que denunciaba una de estas situaciones. El tren en el que circulaba comenzó a arder.
El caos del tren en Extremadura
Extremadura es una de las zonas que peor lo pasa con los trenes. Los trenes más obsoletos son los que suelen viajar en esta comunidad autónoma o en Murcia. El pasado 18 de julio de 22 se produjo la inauguración del AVE en esta región al que acudir diferentes autoridades. Sin embargo, se tuvo que rectificar esta invitación para clasificarse como "primera fase de la línea de alta velocidad Extremadura". Casi un año después, el caos sigue reinando en la red ferroviaria.
Los retrasos siguen siendo el pan de cada día y este servicio ya ha sido bautizado como "el tren de la vergüenza" por el tipo de trenes que circulan con material ya obsoleto y que se quedan viejos en 2023.
El tren que más tarda
Hay tramos de tren en los que se tarda mucho mas que si se hace con un coche. Esto ocurre en uno de los tramos que conecta Cantabria con Asturias. Lo que más llama la atención a los viajeros es que en el tramo de Ferrol a Oviedo se tarda una hora y media más que hace unos años.
El tiempo que invierte el tren en hacer este recorrido llega a ser de 5 horas. Se trata de un trayecto que en coche es mucho más rápido, concretamente de 2 horas y 40 minutos.